La ministra de la Función Pública Lilian Soto denunció ante la fiscalía por tráfico de influencias al presidente de la Cámara de Diputados, el opositor Víctor Bogado, de quien solicitó su procesamiento junto a otros cuatro legisladores.

Soto relató que “Bogado envió un memo con una frondosa lista de recomendados para trabajar en la Dirección de Beneficencia (Diben)”, el pasado 7 de enero. Dijo además que incluyó en su denuncia a otros cuatro parlamentarios pertenecientes tanto a partidos opositores como oficialistas.

La funcionaria dijo a periodistas que “si no denunciaba (los presuntos casos de corrupción), iba a ser una figura decorativa” en ese cargo.

Bogado, perteneciente al partido Colorado, replicó diciendo que la denuncia tiene “motivaciones políticas” para desprestigiar a su partido y planteó a su turno que querellará a la ministra “por difamación y calumnia”.

Una de las acusadas, la diputada Blanca Mignarro, perteneciente al oficialista partido Liberal, dijo que no existe tal tráfico de influencias, “ya que son solo pedidos” para que se contrate a las personas que ellos indican.

“Tráfico de influencia sería en caso que yo ordene la inclusión de una persona en un cargo público rentado”, dijo a su turno el presidente de la cámara de Diputados.