Con arraigo nacional, firma diaria y prohibición de acercarse a su familia, quedó el médico veterinario de nacionalidad colombiana que se llevó a su hija sin consentimiento de su madre.

La madre, quien también es colombiana y de profesión odontóloga colombiana, no se dio cuenta de que el hombre se llevaba a su hija de 4 años.

La determinación la adoptó la fiscalía local, que dio un plazo de 60 días para investigar el hecho.

Cabe señalar que el veterinario viajó de Calama y fue detenido en las cercanías de la embajada de Colombia en Santiago.