Se inauguró la primera planta de biodiesel en la Universidad Técnica Federico Santa María, gracias los aceites quemados y fritos pueden ser reutilizados como combustibles.
El cambio climático y los altos niveles de contaminación que afectan al planeta, llaman a trabajar de manera urgente en la reutilización de los desechos. Por esto, tras un trabajo conjunto por tres años, entre la Universidad Técnica Federico Santa María y la Municipalidad de Hualpén, se inauguró la primera planta piloto de biodiesel del Bío Bío.
23 millones de pesos costó la fábrica, que recupera los aceites fritos y quemados de localidades como Lenga y locales comerciales de Concepción para crear combustibles amigables con el medio ambiente.
Miguel Cruz, vecino del Parque Residencial, se mostró entusiasmado con la medida y reconoció tener un bidón para recolectar los desechos en su casa, para posteriormente llevarlos a la municipalidad o a la casa de estudios para reciclarlos.
Roberto Vera, docente del área mecánica de la Universidad, explicó el proceso, con el que, con 100 litros de aceite quemado se obtienen noventa litros de biodisel, 8 litros de glicerina, que pueden ser transformados en jabones y restos químicos de metanol, que también puden ser reutilizados.
El Seremi de Medio Ambiente, Pedro Navarrete, expresó que esta medida, ayudará a la disminusión de los contaminantes y espera que se replique en otras comunas.
El biodisel puede ser usado directamente en vehículos, combinándolos a la razón del 20% con combustibles tradicionales, logrando un ahorro en esa proporción y sin hacer cambios mecánicos al motor.
