Locales comerciales de Osorno ya comienzan a ver el impacto de la fiesta Halloween. Provistos de máscaras, gorros, capas y un sinnúmero de artículos relativos a esta celebración, los vendedores esperan a los padres y sus niños ansiosos de disfrazarse y ser partícipes de los festejos del 31 de octubre.

Provistos de máscaras, gorros, capas y un sinnúmero de artículos relativos a esta celebración, los vendedores esperan a los padres y sus niños ansiosos de disfrazarse y ser partícipes de los festejos del 31 de octubre.

Para Jenny Nettig, administradora de un céntrico local dispuesto con disfraces, señaló que las ventas, si bien están lentas, aumentarán exponencialmente en las próximas horas.

Paola Miranda es madre de una menor de 7 años, y en conjunto andaban en búsqueda del disfraz ideal. Para ella los puntos claves radican en la estética y en el precio.

Por su parte, Lilia López, vendedora de otro de los locales, se refirió a los disfraces más pedidos por los niños que buscan salir a asustar por las calles de Osorno, y cuyos precios no exceden los 5 mil pesos.

Así está el panorama en la presente versión de Halloween, una fiesta que, si bien no tiene su origen en Chile, ha cobrado gran fuerza en el país.

En este respecto, y sólo a modo de consejo, los dueños de hogares pueden desde ya adquirir algunas golosinas para estar preparado ante la gran pregunta en este 31 de octubre por parte de las brujitas, fantasmas y vampiros de la ciudad: ¿Dulce o travesura?