El presidente ruso Dimitri Medvedev afirmó que nuevas sanciones contra Irán son posibles si no hay avances en las negociaciones sobre el controvertido programa nuclear de la República islámica, anunció el Kremlin el sábado.

Medvedev confirmó que Rusia está dispuesta a cooperar en el enriquecimiento de uranio iraní si Teherán acepta el plan propuesto por la comunidad internacional.

“Si los responsables iraníes adoptan una posición menos cooperativa, entonces en teoría todo es posible”, dijo Medvedev en una entrevista otorgada al semanario alemán Spiegel, cuya transcripción fue divulgada por el Kremlin.

“Si no hay avances” en las negociaciones con Teherán “nadie puede excluir” la posibilidad de sanciones, añadió el presidente ruso, cuyo país -miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU- es un participante clave en las negociaciones con Teherán sobre su programa nuclear.

El 21 de octubre, en Viena, en el marco de una reunión entre Irán, Francia, Rusia y Estados Unidos, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) había presentado un proyecto de acuerdo que permitiría garantizar a Teherán la entrega de combustible nuclear para su reactor de investigación.

Según los términos de dicho acuerdo, Irán debía exportar la mayor parte de su uranio débilmente enriquecido para un enriquecimiento suplementario en Rusia.

Sin embargo, el sábado el presidente de la comisión de Seguridad Nacional y Relaciones Exteriores del Parlamento, Alaeddin Borujerdi, dijo que Irán se niega a enviar su uranio enriquecido al extranjero a cambio de combustible para su reactor de investigación en Teherán, según declaró el sábado citado por una agencia iraní