Brice Taton, el hincha francés del Toulouse que resultó gravemente herido el 17 de septiembre en Belgrado, murió, según anunciaron este martes a la AFP fuentes del hospital en el que permanecía ingresado.

“El hincha francés ha muerto”, declaró Drago Jovanovic, portavoz del hospital de la capital serbia en el que se encontraba Taton, confirmando las informaciones de la radio B92.

Brice Taton, de 28 años, sufrió una agresión en el centro de Belgrado por aficionados del Partizán antes del encuentro de la Europa League de fútbol (ex Copa de la UEFA) entre el Toulouse y el club serbio y en el que se impuso el equipo galo por 3-2.

Taton resultó herido de gravedad en dicho ataque mientras que otros 2 aficionados franceses también sufrieron heridas leves. Tras su hospitalización, el estado de salud de Taton se degradó progresivamente.

El anuncio de la muerte de Tatón generó reacciones en Francia, especialmente en el ámbito deportivo. Así, el presidente de la Liga de de Fútbol Profesional (LFP) de Francia, Frédéric Thiriez, se solidarizó este martes con el presidente del Toulouse, Olivier Sadran, a través de una carta.

En la misiva, Thiriez manifestó su “emoción personal” tras la muerte del hincha galo. “Comparto tu pena y la de todos los aficionados. Cuento contigo para hacerle llegar mi pésame a la familia de Brice Taton”, escribió el presidente de la LFP.

Por su parte, el club galo manifestó a través de su página de Internet que, tras la muerte del aficionado, la entidad vive momentos de “duelo” y pidió por que llegue “la hora en la que toda la violencia en el deporte tenga que castigarse severamente”.

En este sentido también se manifestó la Secretaria de Estado francesa para el Deporte, Rama Yade, quien realizó un llamamiento este martes para que Serbia no deje este crimen “sin castigo”.

“Esta tragedia pone de luto a todo el fútbol de Europa pero no debería quedar sin castigo”, declaró Yade en un comunicado en el que pidió “la mayor severidad contra los responsables de este asesinato” y apoyó “los esfuerzos de las autoridades serbias para no dejar este crimen sin castigo”. (AFP)