El retorno clandestino del presidente hondureño, Manuel Zelaya, a su país fue “irresponsable” y no sirve a los intereses de su pueblo, declaró este lunes el representante alterno estadounidense ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Lewis Amselem.

“El retorno del presidente Zelaya a Honduras es irresponsable y no sirve ni a los intereses de su pueblo ni a aquellos que buscan el restablecimiento pacífico del orden democrático en Honduras”, dijo Amselem durante un Consejo Permanente de la OEA, reunido en sesión extraordinaria.

“Los que facilitaron el retorno del presidente Zelaya tienen una especial responsabilidad para prevenir la violencia y el bienestar del pueblo hondureño”, explicó el diplomático, sin dar más detalles.

La declaración del diplomático supuso un cambio de nuevo en la política estadounidense ante la crisis en el país centroamericano.

La secretaria de Estado, Hillary Clinton, había expresado la semana pasada su esperanza de que el retorno de Zelaya fuera una “ocasión” para el inicio de una negociación entre ambas partes en el país centroamericano para una salida pacífica a la crisis.

“Ahora que el presidente Zelaya volvió, sería oportuno devolverle su puesto” y “seguir adelante con las elecciones previstas para noviembre, tener una transición pacífica de presidentes y devolver a Honduras el orden democrático y constitucional”, dijo Clinton en Nueva York el pasado lunes, tras reunirse con el principal mediador en la crisis, el presidente costarricense Oscar Arias.

“El presidente Zelaya debería ejercer liderazgo y pedir a sus seguidores que expresen sus puntos de vista pacíficamente”, sugirió el representante alterno ante la OEA.

“El pueblo de Honduras está sufriendo”, denunció Amselem, quien se mostró igualmente crítico con el régimen de facto liderado por Roberto Micheletti.

La expulsión de cuatro diplomáticos de la OEA el domingo, que motivó la reunión extraordinaria del Consejo Permanente este lunes, “constituye un insulto a la comunidad internacional y a esta organización”, dijo Amselem.

(AFP).