Microsoft develó el martes en Nueva York dos teléfonos Lumia de alta gama y una computadora portátil presentados como los portaestandartes de Windows 10, la nueva versión de su sistema operativo, con la esperanza de recuperar camino en el mercado de los aparatos móviles.

El Lumia 950 tiene una pantalla de 5,2 pulgadas de alta calidad (HD), 32 gigabytes de memoria y una cámara de 20 megapíxeles. Se vende por 549 dólares ($373 mil).

Por 649 dólares ($442 mil), el Lumia 950 XL tiene una pantalla de 5,7 pulgadas HD y, también, una cámara de 20 megapíxeles. A modo comparativo, las cámaras de los últimos iPhone 6S y 6S Plus son de 12 megapíxeles.

Ambos tienen un escáner de iris, para desbloquear el acceso al aparato, denominado Windows Hello Beta.

Disponibles a partir de noviembre, los aparatos vienen además con el Windows 10, su nuevo sistema operativo que pretende ser universal, es decir válido para el PC, los aparatos portátiles, las consolas de videojuegos Xbox y las gafas de realidad virtual Hololens.

Microsoft se ha quedado atrás en el mercado de los teléfonos inteligentes, dominado por Apple, Samsung y los fabricantes chinos que usan el sistema operativo Android de Google.

Su cuota de mercado en este sector estará cerca de 3% este año, según la firma IDC.

Por otra parte, Microsoft prosigue con su ofensiva dirigida a las empresas y develó también el martes la Surface Pro 4, una nueva versión de su tableta. Por 899 dólares ($612 mil) a partir de octubre, tiene los mismos accesorios que la anterior, pero con una pantalla mayor y un lápiz más preciso.