El Ministerio de Educación abrió en las últimas semanas una serie de investigaciones formales en contra de cuatro universidades privadas: Las Américas, Andrés Bello, Iberoamericana y Gabriela Mistral.
La medida -que se suma a lo iniciado a mediados de 2013 contra U. La República y San Sebastián- es un paso previo a la apertura de procesos administrativos sancionatorios, que pueden terminar en el cierre de la institución, hecho que hasta ahora sólo ha conocido la Universidad del Mar.
Fue mediante la entrega de información de la Comisión Nacional de Educación (CNA), en el proceso de acreditación de las casas de estudios superiores, lo que impulsó las investigaciones que partieron entre noviembre de 2013 y febrero de este año.
En el caso de Las Américas, de Laureate International University, del que también es parte Andrés Bello, la Comisión Nacional de Acreditación y el Consejo Nacional de Educación (CNED) cuestionan los contratos que tienen las universidades con sus controladores, y el uso de sus servicios, según informó El Mercurio.
Sobre este mismo plantel, la ministra de Educación, Carolina Schmidt, aseguró que “adicionalmente, enviamos al Ministerio Público todos los antecedentes de la CNA y los que recopilamos nosotros”, misma situación con la Universidad Andrés Bello.
“Este gobierno ha hecho más por la transparencia y la fiscalización de las universidades privadas, que todas las últimas administraciones”, indicó la secretaria de Estado, recordando además que fue la actual administración la primera en solicitar datos auditados a las insitituciones
