Algo que marca el inicio de la época universitaria sin duda alguna es el mechoneo. Un ritual algo asqueroso, que dependiendo del ánimo de los estudiantes que dan la bienvenida, pueden incluir huevos, harina, mezclas de distintos líquidos, pescado, cabeza de chancho, la ropa cortada y rayas por todo el cuerpo que -en algunos casos extremos-, son realizadas hasta con spray.
Esta tradición muchas veces es aceptada por los jóvenes -que luego de recibir todos estos productos en su cuerpo deben salir a pedir dinero-, ya que “hay que vivirlo”. Sin embargo, las casas de estudio se muestran en contra de este tipo de prácticas, aludiendo a que son denigrantes y humillan a los alumnos.
Sin embargo, hay algunas casas de estudio que quieren marcar la diferencia. Francisco Covarrubias, decando de pregrado de la Universidad Adolfo Ibáñez, comentó que han tomado la iniciativa de realizar un “mechoneo social”, poniéndose de acuerdo con los centros de estudiantes.
Lo que buscan hacer es labor social, en un plan que incluye a municipalidades que nombran lugares como fachadas de casas o viviendas sociales que necesitan ser pintadas, momento en que los estudiantes entran en acción, armando grupos que ayudarán a estas comunidades.
“Tratamos todos los días del año aportar en la docencia, ojalá que con esto podamos tratar que otras universidades se unan a la iniciativa”, dijo el decano, quien se mostró muy en contra de lo que hoy se realiza como “tradición”. “Hablan de educación gratuita y de calidad pero recibir a los estudiantes de esa forma es indignante”, afirmó.
Escucha a continuación todos los detalles de esta iniciativa, en la entrevista realizada por Rafael Venegas:
