La Central Unitaria de Trabajadores Provincial de Valparaíso criticó el rol de la empresa constructora RVC en el incendio registrado el pasado jueves en la ciudad puerto y entregó su respaldo al soldador que prestaba servicios a la compañía, quien fue formalizado el fin de semana como responsable del siniestro ocurrido en Rodelillo, San Roque, Placeres y La Planchada, el que dejó cientos de casas consumidas por las llamas.

El presidente regional de la CUT, Roberto Aravena, lamentó que se enjuicie al trabajador por sobre la empresa, lo que es a su juicio un hecho “recurrente en el sistema laboral chileno”.

El Presidente de la Confederación de Trabajadores de la Construcción, la madera y los materiales, José Santos, añadió que este caso demuestra la lógica perversa que existe en esta materia, donde las autoridades dan extremas facilidades para que las empresas inicien faenas sin velar por la seguridad de los trabajadores ni de la población.

Carlos Rivas, también fue apoyado por la Central Unitaria de Trabajadores de la Región de Valparaíso, en voz de su presidente Roberto Aravena, quien lamentó que se enjuicie al trabajador en lugar de la empresa.

Tanto la CUT de Valparaíso como la confederación de trabajadores de la construcción, coincidieron en manifestar que respaldarán legalmente al trabajador imputado.

Desde la cuestionada constructora RVC, el gerente general, Roberto Bascuñán ha negado que el incendio se deba a un actuar negligente, mientras ha insistido en que prestará todo su apoyo a la investigación judicial.

La CUT provincial emplazó a las autoridades para investigar la responsabilidad de la empresa constructora RVC, la que al estar a cargo de las faenas que se realizaban “tenía la responsabilidad de adoptar el máximo de medidas de seguridad” para evitar este y otros accidentes.