El checo Tomas Berdych venció en cinco sets, 6-3, 3-6, 6-3, 6-7 (5/7) y 6-3, al español Nicolás Almagro, este viernes en el estadio 02 Arena de Praga en el segundo partido de singles de la final de la Copa Davis de tenis, y puso un parcial global de uno a uno.

Con este resultado, que a pesar de lo ajustado era casi previsible dado que no sólo la superficie favorecía al vencedor sino también le gana 9-3 en su estadística personal a su vencido, la final quedó parcialmente igualada tras la victoria relativamente fácil (6-3, 6-4 y 6-4) de David Ferrer sobre Radek Stepanek en el primer encuentro.

Así, el duelo de dobles sabatino puede tener una importancia casi decisiva y, al menos en los papeles, los españoles Marcel Granollers y Marc López parecen llegar más sólidos que los locales, Lukas Rosol e Ivo Minar.

En la primera manga todo comenzó en un mano a mano que recién pudo romper el checo en el octavo juego para colocarse 5-3 arriba y cerrarlo con su servicio en 36 minutos.

Sin embargo, en la segunda, cuando aupado por su público el jugador oriundo de Valasske Mezirici parecía más entero, ‘Nico’ Almagro no se amilanó y en el sexto juego hizo el break a su rival poniendo la manga 4-2 a su favor y 5-2 arriba con su saque, dominando en el marcador precisamente gracias a un estupendo servicio y cerrando en 6-3 con un juego blanco, y poner así el general un set a uno.

La tercera manga parecía que podía bascular a favor del murciano, de 27 años y N.11 mundial de la ATP, quien el primer game casi hace el break a Berdych, de también de 27 años y N.6, pero no sólo no fue así sino que el checo se lo hizo a él para 2-0 y seguir a 3-0 con un juego blanco, detalle que le devolvió su rival en el siguiente, pero el parcial ya estaba encaminado para el anfitrión que lo ganó por 6-3 en 45 minutos.

En el cuarto set, Berdych salió más confiado e hizo el break a Almagro desde el inicio. Pero, éste no se dio por vencido y le retrucó en el sexto game para colocarse 3-3, siguiendo un séptimo con golpes espectaculares de parte de ambos jugadores.

La paridad se mantuvo hasta llegar a la ‘muerte súbita’. En el tie-break, el español se mostró más eficaz y se lo llevó 7-6 (7/5) después de haber estado 5-0 arriba y puso el 2 a 2 en el general.

Así, el quinto set se volvió decisivo y, a pesar de mostrarse nervioso y contrariado, Berdych logró hacer el break en el sexto game para ponerse 4-2, pero Almagro le devolvió la gentileza enseguida para 4-3.

El checo volvió a quebrar el servicio al español en un parejo octavo juego (5-3) para terminar con 6-3 en casi tres horas de partido, con absoluta locura en las gradas.

El murciano conectó la friolera de 20 aces a lo largo del encuentro.

Los capitanes Alex Corretja y Jaroslav Navratil probablemente preveían este posible desenlace de la jornada inaugural, pero el primero tendrá que conciliar el sueño pensando en la ocasión perdida, mientras que su colega en el dobles, duelo para el que sí deberá apostar por los efectos de la superficie y el del público a su favor.