Los analistas coincidieron en que resulta preocupante la desafección de la gente con el sistema político que confirmó la encuesta del CEP.

Más allá de la coyuntura sobre la evaluación del gobierno y las candidaturas presidenciales, el sondeo del CEP dio cuenta de cifras que ratifican el desapego de la gente con nuestra democracia y el sistema político.

Sólo un 17% estimó que la democracia en Chile funciona bien o muy bien y un mayoritario 54% aseguró que de manera regular.

A ello se suma la desconfianza que generan algunas de nuestras principales instituciones políticas. Un 6% dijo confiar en los partidos políticos; un 10% en el Congreso; un 13% en los Tribunales de Justicia; y un 23% en el Gobierno.

El sociólogo y académico de la Universidad Diego Portales, Damián Trivelli, opinó que es un escenario preocupante porque -dijo- es caldo de cultivo para proyectos populistas que pudieran interpretar mejor las demandas ciudadanas.

El profesional agregó que es un riesgo del cual Chile no está libre, pese a que los escépticos señalan que la tradición republicana impide el éxito de ese tipo de liderazgos.

El analista Guillermo Holzmann también consideró preocupantes estas cifras que muestran una desafección con las instituciones porque -recordó- son datos que se vienen consolidando desde hace muchos años.

Agregó que la falta de credibilidad en el sistema democrático es una alerta sobre la incapacidad de éste para procesar las demandas de la gente.

Para el sociólogo Alberto Mayol, las protestas del año pasado terminaron por generar un verdadero terremoto para el sistema político.

Mayol agregó que el descrédito del sistema político es parte de una “era de las impugnaciones”, en la que el rechazo a los liderazgos pasa a ser parte de la cotidaneidad.