Una broma inédita se vivió este fin de semana en el el fútbol de Argentina.

Pasa que el el partido entre Newell’s y Lanús, fue interrumpido a los pocos minutos del comienzo por la aparición de 8 hinchas disfrazados de fantasma que perseguían a un individuo, obviamente asociado a su archirrival, Rosario, que deberá jugar la promoción.

Había pasado apenas un minuto del pitazo inicial del árbitro Jorge Baliño, cuando por detrás del arco que defendía el golero de Lanús ingresó un hincha con una bandera de Rosario Central y por detrás ocho hinchas de Newell’s disfrazados de fantasmas y corrieron por dentro del campo de juego.

Al darse cuenta de lo que estaba ocurriendo el juez decidió suspender por unos minutos el partido hasta que todo volvió a la normalidad. La aparición de los “fantasmas” despertó el bullicio del resto del público y enfadó al director técnico del local, el “Tata” Martino. Los jugadores quedaron perplejos.

Tras correr por la cancha los hinchas volvieron a la tribuna por un portón ubicado en el córner entre la platea y la tribuna popular, por donde está el museo. La imagen televisiva mostró cómo agentes policiales los miraron pasar por al lado suyo sin detenerlos.

Además de las consecuencias en materia de seguridad, el club Newell’s podría ser sancionado por la Asociación del Fútbol Argentino.

El partido terminó 0 a 0.