Durante muchos años, el navegador de Microsoft, Internet Explorer, fue sinónimo de dolor de cabeza tanto para usuarios como para desarrolladores de sitios web.

Fallos de seguridad, lentitud, problemas al desplegar las páginas y la negativa a seguir los estándares de Internet le acarrearon tal mala fama, que su cuota de mercado cayó de un 90% a un 50%, en favor de Mozilla Firefox y Google Chrome.

Sin embargo Microsoft vuelve al ataque con la última versión de su navegador, Internet Explorer 9, reconociendo que las anteriores versiones eran odiadas, pero afirmando que ahora es tan bueno, que si quieres desinstalarlo de tu PC, es porque necesitas apoyo psicológico.

Y un gato.

http://youtu.be/4DbgiOCTQts