Las autoridades filipinas subieron el nivel de alerta este sábado ante el aumento de la actividad del volcán Taal, situado en una popular isla cercana a la capital filipina, y pidieron a los turistas que se mantengan alejados de la zona.

El nivel de alerta se sitúa en el nivel dos de una escala de cinco y supone que se restringe el acceso a los alrededores del volcán, un popular destino turístico situado a 65 kilómetros al sur de Manila.

El Taal es uno de los 22 volcanes activos en el país más inestables, que ha registrado 33 erupciones, la última en 1977.

Los vulcanólogos aseguran que la actividad no significa que vaya a haber una erupción, y puede disminuir como ya ocurrió en junio del pasado año.

El lago que rodea al cráter del Taal ha evitado muertes tanto en la erupción de 1977 como en las anteriores, ya que el cuerpo de agua actúa como un cinturón de seguridad que absorbe la lava.