La académica de la Facultad de Enfermería de la Universidad Andrés Bello y especialista en cuidados intensivos pediátricos, Teresa Cuevas, afirmó que pese a la mejora en los estándares y calidad de vida, la pediculosis o ‘piojos’ siguen siendo un problema de salud pública a nivel mundial y nacional, que no sólo afecta a los estratos socioeconómicos bajos, sino que a todas las clases sociales.

Cuevas dijo que debemos aprender a combatirlos en forma periódica porque la presencia del parásito es constante durante el año y se observa un incremento durante el primer mes de inicio del período escolar.

Dijo que la relación entre hombre y mujer es de 1 a 2 y su aparición no involucra necesariamente malos hábitos higiénicos.

“El insecto prefiere los cabellos limpios para vivir. Es más frecuente en zonas urbanas o suburbanas, de preferencia aquellas sobre pobladas. Estos parásitos presentan un cuerpo dividido en tres segmentos: cabeza, tórax y abdomen. La cabeza tiene un par de ojos, antenas y aparato bucal con el cual succiona la sangre”, explicó la especialista.

“En el tórax tienen tres pares de patas tipo gancho que le permiten fijarse al pelo. En el abdomen poseen un aparato respiratorio membranoso que puede abrir y cerrar. Esto explica que pueden vivir en el agua hasta 36 horas”, dijo Teresa Cuevas.

Agregó que los piojos son parásitos muy lábiles y sobreviven solo 48 horas fuera del hospedero.

El contacto directo “cabeza con cabeza” es el principal mecanismo de transmisión, siendo el hacinamiento humano, factor clave en su propagación. También puede transmitirse por medio de peinetas, pinches, cepillos, sombreros, gorros, bufandas o aparatos de audio personales.

Existe un macho y una hembra, la cual es de mayor tamaño (2,4 a 4 mm.) y es quien pone los huevos (liendres) y el cemento para la fijación de éstos.

Los huevos, llamados liendres, son incubados por el calor corporal del hospedero, se ubican muy cerca del cuero cabelludo y generalmente se encuentra un solo ejemplar por pelo.

Respecto al tratamiento y prevención, dijo que se recomienda el uso de sustancia pediculicida, en presentación loción o champú. Los principios activos más usados y disponibles en Chile son la piretrina y los derivados piretroides, entre otros.

La experta recomienda, además, cambiar y lavar la ropa de cama, peines y peluches.

“El lavado es con agua caliente sobre 60º C. y luego planchas la ropa de cama y otros con plancha bien caliente. Lo que no se pueda planchar se debe eliminar (elásticos de cabello, cepillos de pelo, entre otros). Ayuda la limpieza con aspiradora de alfombras, pisos y tapices”, dijo.

Respecto a indicaciones para prevenir el contagio, la enfermera detalló el lavado de pelo frecuente (tres veces por semana), no compartir peines, colet y sombreros; revisar permanentemente los cabellos de los niños en etapa escolar.

“Es bueno conversar en las escuelas y jardines del tema e informar de la presencia de casos de pediculosis en los cursos y familia; niñas y niños con pelo largo se recomienda llevarlo tomado en sus actividades educativas y recreativas”, concluyó la experta.