Rmkoske en Flickr

Rmkoske en Flickr

Un empresario noruego obsesionado por controlar las idas al baño de sus empleados, impuso una insólita medida a las mujeres que laboran en su compañía: usar una pulsera roja cuando tengan la menstruación.

La extraña norma nace a raíz del afán por evitar que los trabajadores pierdan tanto tiempo usando el servicio sanitario, en ese sentido, la pulsera justificaría por qué “ellas” utilizan tanto el baño durante ciertos días, según informó ABC.

Obviamente, la idea no cayó nada de bien en los empleadas, lo que llevó a que un sindicato de trabajadores denunciara el hecho, a través de un informe que presenta las reglas “tiránicas” de algunas firmas noruegas.

En este documento queda en evidencia que el 66% de los empresarios controla el tiempo que sus subalternos están en el baño, mediante una tarjeta electrónica. Asimismo, también se supo que 1 de cada 3 compañías instaló cámaras de video en el ingreso a los servicios sanitarios, mientras otro tanto obliga a firmar un libro cuando usan el inodoro.

Todos estos antecedentes fueron enviados al ombudsman (defensor del pueblo) noruego, Bjorn Erik Thon, quien señaló que este tipo de acciones “son violaciones claras de la vida privada y un insulto a las personas afectadas”.