En la última temporada, el clima chileno se ha vuelto impredecible. En una misma jornada, los termómetros pueden oscilar entre los 10 y los 28 grados, obligando a las personas a abrigarse en la mañana, abrir las ventanas al mediodía y volver a buscar una frazada al anochecer.
Esta inestabilidad, que antes se asociaba solo a ciertas zonas del país, hoy se experimenta de Arica a Punta Arenas y ha modificado la forma en que los hogares se preparan para el día a día.
El fenómeno no solo se relaciona con el cambio climático, sino también con las nuevas dinámicas de vida. Con más horas pasadas en casa debido al trabajo híbrido, los chilenos se han vuelto más conscientes del ambiente interior y de cómo la temperatura afecta el confort, el descanso e incluso la productividad.
El resultado es claro: cada vez más personas están invirtiendo en soluciones de climatización que equilibren eficiencia energética, comodidad y bajo consumo, adaptándose a un entorno en constante cambio.
Climatización inteligente: el aire acondicionado como aliado del bienestar
Las ventas de equipos de climatización se han disparado en los últimos años, especialmente durante las estaciones de transición. El aire acondicionado se ha convertido en uno de los productos más buscados, ya no solo en verano.
Los nuevos modelos con tecnología inverter representan una revolución en eficiencia eléctrica: permiten enfriar o calefaccionar de forma constante, reduciendo el gasto energético y manteniendo una temperatura estable sin interrupciones bruscas.
A esto se suma la posibilidad de programar horarios, ajustar el consumo y controlar los equipos desde el celular, lo que facilita un uso responsable y personalizado.
Los modelos split inverter, por ejemplo, son ideales para espacios medianos o grandes, donde se busca climatizar una zona completa del hogar. En cambio, los modelos murales más compactos se adaptan mejor a dormitorios o escritorios pequeños, ofreciendo una sensación de confort sin generar un aumento significativo en la cuenta de luz.
Ya no se trata de encender el aire solo en días extremos, sino de crear un entorno equilibrado durante todo el año, donde la eficiencia energética y el bajo consumo sean tan importantes como el bienestar térmico.
Aire acondicionado portátil: versatilidad con bajo consumo
Si buscas un producto que sea flexible, ese es el aire acondicionado portátil. Su facilidad de uso y transporte lo ha convertido en una de las soluciones preferidas para quienes viven en departamentos, espacios arrendados o buscan mover el equipo entre distintas habitaciones.
Los modelos actuales se destacan por su bajo consumo eléctrico, función de deshumidificación y sistemas de programación que permiten mantener temperaturas confortables sin desperdiciar energía. Son perfectos para quienes necesitan enfriar o calentar sectores específicos, como una pieza o una sala de trabajo, sin necesidad de realizar instalaciones permanentes.
En departamentos pequeños, un modelo portátil de potencia media (de entre 9.000 y 12.000 BTU) suele ser suficiente; mientras que en espacios más amplios, se recomiendan equipos de mayor capacidad o sistemas fijos inverter que aseguren rendimiento y eficiencia en cada rincón.
El regreso del ventilador: eficiencia y simplicidad cotidiana
Pese al auge de la tecnología, el clásico ventilador mantiene su lugar en los hogares chilenos. Su bajo costo y consumo eléctrico mínimo lo hacen una opción práctica y complementaria para quienes buscan mantener la circulación del aire sin depender completamente del aire acondicionado.
Los nuevos modelos han evolucionado: ahora existen ventiladores silenciosos con temporizador, control remoto y aspas aerodinámicas que mejoran la eficiencia del flujo de aire.
En espacios reducidos, los ventiladores de torre o de escritorio son ideales por su tamaño compacto, mientras que en livings o áreas más amplias destacan los modelos de pie con oscilación automática, capaces de distribuir el aire de manera uniforme y refrescar en minutos.
El ventilador también se posiciona como el aliado ideal en los días templados o durante las noches, ofreciendo frescura sin comprometer la eficiencia eléctrica del hogar.
Un nuevo consumidor: consciente, eficiente y preparado
El aumento de las variaciones climáticas no solo ha cambiado los productos que se compran, sino también la forma en que se eligen.
Hoy, el consumidor chileno prioriza la eficiencia energética, la tecnología inverter y el bajo consumo. Busca equipos silenciosos, programables y adaptables a distintos tipos de espacio, entendiendo que el confort no depende solo de la potencia, sino también de la inteligencia del uso.
Las tiendas y plataformas digitales han registrado un aumento sostenido en la búsqueda de equipos de climatización durante todo el año, lo que evidencia una nueva mentalidad: mantener una temperatura equilibrada es parte del bienestar cotidiano. Ya no se trata solo de soportar el calor o el frío, sino de vivir en armonía con el entorno sin desperdiciar energía.
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