La gran mayoría de los estudiantes se ven enfrentados a la tentación de hacer trampa o copiar durante una prueba o examen. Mientras algunos rechazan la idea, otros crean verdaderos planes para que no los descubran.

Los profesores tienen esto claro y a pesar de sus esfuerzos no siempre pueden evitarlo. Sin embargo, un creativo docente de ingeniería de una prestigiosa Universidad de Estados Unidos, puso una trampa para descubrir a aquellos que no siguieran las reglas.

La historia fue compartida en la red social Reddit por el usuario Mwxh, que estuvo presente aquel día y aseguró que el maestro agregó una pregunta falsa en un examen final.

“Tomé mi prueba final de una clase de ingeniería esta mañana. Por lo general, 1 o 2 personas piden ir al baño durante la clase, sin embargo, por razones totalmente desconocidas, aproximadamente la mitad de la clase necesitaba usar el baño durante el examen”, comenzó su relato.

“Obviamente, la gran mayoría de ellos estaban buscando las respuestas en sus teléfonos. Esto me irritó, pero me concentré en mi prueba y apenas la pude terminar, porque era un examen difícil”, añadió.

“Recuerdo que había una pregunta en particular que apenas estaba relacionada con las cosas que vimos en clases, donde la parte A era bastante fácil, pero no tenía idea de cómo hacer la parte B. Sin embargo, no me preocupé demasiado, ya que esa parte valía solo 5 puntos de 100″, explicó.

“Bueno, nuestro profesor que está más en el lado de adulto mayor y del que pensé que era un poco ignorante con la tecnología, nos envió un correo electrónico después explicando su plan diabólico para atrapar tramposos”, reveló.

El plan

Según explicó el joven, muchos de los estudiantes en esa clase usaban Chegg, un sitio web que tiene respuestas a muchas preguntas de tareas y pruebas. “Para ser justos, también tengo una cuenta, aunque solo la utilicé para estudiar y verificar soluciones de algunas tareas”, aseguró.

“De todos modos, en el mail (el profesor) explicó que estaba cansado de que la gente fuera al baño y buscara respuestas en sus teléfonos, así que hizo la pregunta que mencioné anteriormente como una trampa. A propósito hizo que la parte B fuera imposible de resolver”, afirmó.

Según el joven, hace un mes el profesor se creó una cuenta en Chegg para subir la pregunta exacta, y otra para compartir la respuesta, que en realidad era “una solución de mierda que parecía correcta a primera vista, pero que en realidad estaba fundamentalmente defectuosa, y que era muy poco probable que alguien hiciera las mismas suposiciones y cometiera los mismos errores de forma independiente”.

“Dijo que de los 99 exámenes, 14 de ellos cayeron en la trampa”, aseveró. “Todos los que tenían aquella solución incorrecta en su examen recibieron un 0, y fueron reportados a la universidad por violar el compromiso de honor académico que habían firmado”, explicó.

El maestro también envió un correo electrónico a todos los otros profesores del departamento dándoles la lista de tramposos.

El joven finalizó la historia asegurando que el docente dio todos los puntos de aquella pregunta, a quienes no hicieron trampa.

El relato, por supuesto, se volvió viral y miles de profesores y estudiantes comenzaron a intercambiar sus propias historias.