Entre los heridos, el médico reconoció a una de sus pacientes, la pequeña Miah Cerrillo, quien sobrevivió a los ataques luego de manchar su ropa con la sangre de un compañero y confundir al atacante.
A poco más de dos semanas desde el fatídico tiroteo que ocurrió en la Escuela Primaria Robb de Uvalde, en Texas (Estados Unidos), varios han sido los testimonios que se han dado a conocer. Uno de ellos fue el de Roy Guerrero, un pediatra que estuvo presente en la sala de urgencias y que atendió a los estudiantes heridos.
Durante una audiencia realizada en el Congreso estadounidense, Guerrero narró el brutal escenario en el que se convirtió la sala de emergencia del hospital. “Nunca podré sacarme de la cabeza los llantos de esas madres”, expresó el profesional y agregó que “nunca olvidaré lo que vi ese día”.
La masacre escolar fue perpetrada por un joven identificado como Salvador Ramos, de 18 años, quien acabó con la vida de 21 personas, entre las que estaban 19 menores de edad y dos profesoras. En tanto, los cerca de 17 heridos y víctimas moribundas llegaron hasta el Hospital Memorial de Uvalde.
Según el periódico The New York Times, tras enterarse de lo sucedido, el Dr. Guerrero acudió rápidamente hasta el recinto de salud, donde se encontró a decenas de preocupados padres solicitando información de sus hijos y familiares.
Una espantosa escena
Ante el Comité de Supervisión y Reforma de la Cámara de Representantes, el profesional declaró que la primera persona que vio fue a la pequeña Miah Cerrillo (11 años), la estudiante que manchó su ropa con la sangre de un compañero para camuflarse del atacante.
La escolar sufrió una herida en el hombro y se encontraba en evidente estado de shock. El médico conocía a la menor, ya que desde que era una bebé fue su paciente en diferentes intervenciones quirúrgicas a las que se sometió.
“La dulce Miah, la conozco de toda la vida. Cuando vi a Miah sentada allí, recordé haber visto a sus padres afuera, corrí afuera para hacerles saber que Miah estaba viva”, contó.
Una vez que ingresó al hospital, el pediatra se sorprendió con la sangrienta escena que presenció en la sala de urgencia, donde recuerda claramente haber visto a dos niños “decapitados” por los disparos.
El profesional dijo: “Niños inocentes de todo el país hoy están muertos porque las leyes y las políticas permiten que las personas compren armas antes de que tengan la edad legal necesaria para poder comprar unas cervezas”.
De acuerdo con los antecedentes que manejan las autoridades, el tirador utilizó un rifle AR-15, el mismo modelo de arma que ha sido usado en otras matanzas colectivas de Estados Unidos.
“Me presenté porque soy médico, hice juramento de no hacer daño. Después de presenciar de primera mano la carnicería en mi ciudad natal de Uvalde, permanecer en silencio hubiera sido traicionar ese juramento. La inacción es un daño”, expresó el Dr. Guerrero ante los congresistas.
