Una pareja de California batalla actualmente en tribunales con una clínica especializada en reproducción luego que un procedimiento por fertilización in vitro (FIV) saliera bien, pero con el bebé equivocado.

En concreto, Daphna y Alexander Cardinale buscan compensaciones económicas a discreción de la justicia por parte del California Center for Reproductive Health (CCRH).

“Durante un procedimiento de FIV, CCRH supuestamente transfirió el embrión de la pareja a Daphna, que luego se embarazó y dio a luz a una niña sana”, se lee en la demanda.

“Después del parto, sin embargo, Alexander estaba confundido y consternado por el hecho que ella no se parecía a ninguno de sus padres”, dice el texto.

Dudas desde el primer momento

De acuerdo a la acción judicial, el padre tuvo dudas respecto a su hija desde el mismo momento en que llegó a mundo.

“Alexander sintió que algo andaba mal, aunque inicialmente no pudo detallarlo”, indica su defensa.

“(Él) Recuerda estar muy sorprendido por la apariencia de su hija biológica. Esperaba ver una niña rubia, al igual que su hija mayor. En cambio, salió con una piel mucho más oscura y cabello negro azabache”, se complementa en el documento.

Dos meses después del nacimiento, en noviembre de 2019, una prueba de ADN confirmó las sospechas del hombre: la bebé no era suyo.

Ahí empezó oficialmente el calvario de la pareja que, para enfrentar el proceso, buscó un abogado que tomó contacto con la clínica.

Tras ello, el recinto anunció que habían encontrado a una pareja también cliente de ellos con otra niña recién nacida y que podría ser su hija.

Una nueva ronda de pruebas de ADN fue tomada el 16 de diciembre de 2019, la que el 24 de ese mismo mes arrojó que efectivamente cada madre había dado a luz a la hija de la otra.

El 31 de diciembre cada pareja conoció a su hija por primera vez, a meses de haber nacido.

Cambio permanente

Al tiempo del primer encuentro, ambas familias decidieron mantener el contacto.

Con el paso de las semanas cada pareja también acordó tener a su verdadera hija por periodos cortos de tiempo.

Aunque lo hicieron, ambas partes llegaron a la conclusión que el esquema sería difícil de lograr, por lo cual intercambiaron bebés de manera definitiva.

“Nuestros recuerdos del parto siempre estarán manchados por la realidad enfermiza que nuestra hija biológica fue dada a otra persona y que el bebé que luché por traer a este mundo no era para quedármelo”, lamentó Daphna en una conferencia de prensa el lunes.

Centro no responde

En la demanda, la familia acusó a CCRH de tener la culpa de lo ocurrido.

Sumado a eso, aseguraron que el problema habría surgido cuando un tercero tuvo contacto con los embriones.

Específicamente, el texto apunta a In VitroTech Labs, Inc. y a su empresa madre, Beverly Sunset Surgical Associates, LLC.

La noticia, recientemente viralizada, dio a la vuelta al mundo en cosa de días. Consultado por la BBC y The Washington Post, CCRH no respondió a ninguna de sus preguntas.

FIV en Chile

La fertilización asistida (o in vitro) es un tratamiento médico basado en un conjunto de procedimientos que busca por medio de diferentes técnicas facilitar el embarazo en aquellas personas que por diversos motivos no pueden lograrlo.

El Fondo Nacional de Salud (Fonasa) cuenta con un programa de fertilización asistida de baja y alta complejidad a través de la red pública de salud o Modalidad de Atención Institucional (MAI), y la red de instituciones privadas en convenio.

Si se mira la modalidad de FIV, hablamos de la fertilización del óvulo por el espermatozoide en un medio artificial, pero producido naturalmente a través de la incubación de los espermatozoides con el óvulo.

Lo anterior se puede lograr con una inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI) o una inyección de un único espermatozoide en el interior del óvulo.