Un caso policial ha conmocionado a Estados Unidos en la última semana, luego que se confirmara la captura y procesamiento contra una mujer llamada Ashley Marks, acusada de matar a su hijo con una sobredosis de drogas. El objetivo habría sido cobrar un millonario seguro de vida.

Según detalla la cadena CBS la historia tiene su inicio en abril de 2020, cuando Jason Sánchez-Marks, hijo de la acusada, y su hermana se fueron a vivir al domicilio de su abuelo, debido a que su madre había iniciado un nuevo trabajo en las afueras de la ciudad en Texas.

Poco tiempo después, de acuerdo a los archivos del caso, los dos niños enfermaron de tuberculosis, por lo que su madre comenzó a visitarlos con mayor frecuencia y darles medicamentos orales (píldoras).

De acuerdo a lo que expuso el abuelo a las autoridades, en aquellas oportunidades sólo el hijo aceptó los supuestos fármacos, mientras que su hermana se negó sistemáticamente.

A eso agregó que, al poco tiempo, el pequeño Jason comenzó a presentar severos problemas de salud, con vómitos bastante frecuentes e incluso sufrir alucinaciones. “Mi nieto creía que había insectos en su ropa”, aseveró.

Producto de este deterioro en la salud, el niño falleció en julio del año pasado. En ese entonces las causas de su deceso fueron declaradas como “naturales”, por lo que fue enterrado y se le hizo un funeral.

Jason Sánchez-Marks | Archivo familiar

No obstante, a fines del año pasado las autoridades comenzaron a sospechar sobre Ashley Marks, debido a que en ese momento ella cobró el dinero de dos seguros de vida que estaban relacionados a su hijo. Cada uno de ellos estaba avaluado en 100.000 dólares (71.810.000 pesos chilenos).

Tras eso, la investigación determinó que la única beneficiaria de aquel dinero fue la propia mujer.

Con estos antecedentes, la Oficina del Fiscal de Distrito del condado de Harris ordenó exhumar el cuerpo del niño y realizar estudios especializados, con el objetivo de tener mayores antecedentes respecto a su muerte.

La autopsia arrojó que a Jason “se le había suministrado un sin fin de drogas, con el objetivo de quitarle la vida”. Entre ellas había metanfetamina, cocaína y antihistamínicos.

De acuerdo a lo expuesto por el citado medio, Ashley Marks podría ser sentenciada a la pena de muerte si se comprueba lo que expuso la Fiscalía. Uno de los demandantes en el caso es el padre del pequeño, Mario Sánchez.

“Le encantaba ir al parque a jugar con su hermana pequeña. Solo quiero despertarme y decir que todo fue un mal sueño”, detalló Mario.