Hace algunos días la marca de ropa Carnaval, que confecciona ropa para ocasiones especiales, lanzó una nueva línea que está inspirada en la cultura Selknam, la cual era oriunda de Tierra del Fuego, situación que no ha caído nada de bien en algunos usuarios de redes sociales.
En un inicio, desde la compañía indicaron que se habían inspirado en la historia de este pueblo americano, que comenzó a desaparecer a comienzos del siglo XX.
“El proyecto fue un trabajo de equipo, donde nos inspiramos en cada historia de la cultura Selknam para crear trajes ‘Halaháche, Ulen y Jóichik’. En el packaging además encontrarás una pequeña historia acerca de cada uno”, expresaron en redes sociales.
No obstante, la situación no cayó muy bien entre usuarios de redes sociales, quienes criticaron la iniciativa y acusaron a los creadores de una presunta apropiación cultural.
“Como es posible que utilicen las representaciones de deidades y espíritus Selknam para crear un producto como este, es impresentable”, indicó una usuaria en Facebook.
“Me parece realmente vergonzoso que se utilicen las representaciones de deidades y espíritus Selknam para hacer un disfraz, estas pinturas corporales se utilizaban para rituales sagrados y este grupo que se autodenominó como ‘diseñadores crack’ tiene la desfachatez de crear este impresentable ‘producto’ como si nada. Hablemos de la vergüenza ajena y la apropiación cultural”, agregó otra persona.
Aunque, por el contrario, también hubo personas que restaron validez a la denuncia iniciada en redes sociales, indicando que situaciones similares han ocurrido con la cultura Mapuche.
“Hay diseñadores que usan joyería y prendas mapuches en sus colecciones, otros elementos de otros pueblos originarios, a mí me parece más grave olvidar a estos pueblos”, sostuvo un usuario.
“Nos hemos inspirado toda la existencia en culturas de todo el mundo (romanos, egipcios, amazonas, pieles rojas, árabes, etc) ¿Por qué tanto enojo con esto? Encuentro que es demasiada exageración”, indicó otro usuario.
La serie de críticas motivó a que la marca realizara un comunicado público, donde explicaron que quisieron darles valor a los atuendos de diversas culturas chilena.
“Como empresa abordamos este proyecto, ya que vemos como año a año, durante el mes de Septiembre, tanto colegios como jardines infantiles realizan bailes y presentaciones con objeto de Fiestas Patrias. Es así como madres, padres y/o cuidadores se ven en la necesidad de comprar estos trajes, que en muchas ocasiones son de baja calidad, los cuales solo se usan para la presentación y luego quedan inutilizables en un cajón o simplemente en la basura”, indicaron.
“Ante esto vimos dos problemas. Por un lado el gasto excesivo de dinero en trajes de un solo uso y por otro, como trajes que muestran la multiculturalidad del país quedan escondidos en un cajón e inutilizables. De esta forma quisimos poner en valor estas culturas indígenas, diseñando trajes que respetaran los símbolos de cada una y que, a su vez, pudiesen ser utilizados en otras ocasiones, dándoles el respeto y valor que merecen”, agregaron.
“Queremos dejar en claro, que esto fue un proyecto de meses, donde hubo una larga investigación de por medio, iniciada en la problemática antes expuesta. También explicar que conocemos la historia del pueblo Selknam y en ningún caso ha habido aprovechamiento de un genocidio como se dijo en muchos comentarios. Como equipo estamos abiertos a discutir y explicar cada proyecto que realizamos, siempre que sea desde una esfera de respeto y consciencia del trabajo que hay detrás de cada producto creado. Sin embargo, creemos que en esta oportunidad faltó explicar el contexto que nos llevó a levantar este proyecto, para así entender que lo hacemos con la mejor de las intenciones”, concluyeron.
Por su parte, desde la Corporación Selknam de Chile indicaron en redes sociales que lo realizado por la marca Carnaval sería una utilización de su patrimonio.
“Con esta forma de apropiación cultural se transgrede a todo un pueblo a sus ancestros y a su espiritualidad. Es para nosotros terrible la forma de utilización de nuestros espíritus: Halaháche, Ulen y Jóichik”, indicaron
“Los Selknam del presente repudiamos todo tipo de mal utilización de nuestro patrimonio material para la comercialización indiscriminada”, agregaron.
“Lamentablemente, esta no es la única agresión que sufrimos actualmente, y que se suman al genocidio y maltrato histórico a nuestro pueblo. Es por ello que pedimos que el Estado y el Gobierno que impulse con rapidez el proyecto de ley que reconoce al pueblo selknam y lo incorpore a la ley indigna”, concluyeron.
De acuerdo a lo expuesto, el documento fue firmado por las diputadas Claudia Mix, Camila Rojas y Emilia Nuyado.
