El verano ya llegó y con él las altas temperaturas, que este año se prevén superarán las máximas que acostumbramos. En ese sentido, JUNJI Metropolitana entregó consejos para que madres, padres y familias resguarden a niños y niñas desde los primeros meses hasta los cuatro años.

De acuerdo con el Ministerio de Salud, las niñas y niños en primera infancia son un grupo donde se debe tener especial cuidado ante las olas de calor. Esto, dado que “demoran más tiempo en termorregularse y aclimatarse a ambientes más calurosos y húmedos; y responden menos a estímulos ambientales que les produzcan la necesidad de tomar más agua o sacarse la ropa, en comparación a las personas adultas.”

Para la directora regional metropolitana de JUNJI, Mónica Morales Seguel, es de suma importancia que “mantengamos y privilegiemos que niñas y niños se encuentren en espacios seguros y cuidados de estas altas temperaturas, ya que como lo indica la autoridad sanitaria, son un grupo de riesgo. Debemos estar atentos a la ropa que usan, privilegiar ropa fresca, realizar actividades lúdicas con materiales seguros en lugares frescos. Nunca dejarlos solos al interior de vehículos”.

Cómo proteger a los niños pequeños del calor

Según indican desde JUNJI, en primer lugar, nunca se debe dejar a los menores en lugares cerrados sin ventilación. Por ejemplo, autos, furgones o espacios reducidos. También, se debe evitar exponerlos al sol en los horarios de mayor radiación ultravioleta, es decir, de 11:00 a 17:00. En su lugar, privilegiar espacios frescos y de sombra.

Una buena idea es hacer actividades físicas con ellos en horarios vespertinos, aprovechando el horario de verano. Eso sí, es de suma importancia que los niños siempre estén supervisados por un adulto responsable, ya sea en juegos de agua o en el uso de piscinas, entre otros, evitando además el uso indebido de grifos.

Respecto a la hidratación, es de suma importancia ofrecer constantemente agua a lo largo del día. Se debe evitar el consumo de bebidas de fantasía y jugos procesados. En su lugar, aumentar el consumo de frutas y verduras. Estas suman a la hidratación que requieren en esta época, por su alto contenido en agua, y sus azúcares les aportan energía para realizar mejor sus actividades.

En el caso de la lactancia materna, se sugiere aumentar su frecuencia en esta época.

Por último, pero no menos importante, aplicar constantemente protector solar pediátrico factor 50 a niños y niñas, varias veces en el día, sobre todo en las zonas del cuerpo más expuestas al sol. Eso sí, siempre y cuando sean mayores de 6 meses.