Sentirse triste o vacío, muy cansado, sin esperanzas, irritable, ansioso y culpable, son algunas de las señales que podrían indicar que se está padeciendo una depresión. Es una enfermedad clínica que debe ser diagnosticada y tratada por un especialista porque, incluso, puede llevar a la muerte. Un reciente estudio encontró que este padecimiento, sobre todo en niños y adolescentes, está relacionado con la aparición de otras afecciones a lo largo de la vida.

Según concluyó la investigación realizada por investigadores suecos del Instituto Karolinska, publicada en la revista JAMA Psychiatry, aquellos menores de edad que padecen depresión tienen más probabilidades de morir prematuramente y de presentar 66 de 69 infecciones conocidas por el estudio. Entre ellas: diabetes tipo 2, hepatitis viral y anomalías renales y hepáticas.

“Nuestro estudio muestra que los niños y adolescentes diagnosticados con depresión tienen un riesgo significativamente mayor de muerte prematura, autolesiones y padecer otras enfermedades más adelante en la vida”, dijo al portal español ABC la autora del informe Sarah E. Bergen, quien además es investigadora principal del Departamento de Epidemiología Médica y Bioestadística del Instituto Karolinska.

Con esto, advierten que es necesario que, a medida que el niño o adolescente crezca, se indague sobre la posibilidad de presentar nuevas enfermedades.

“Lo importante que es que estos niños y adolescentes reciban la ayuda que necesitan y que el personal médico supervise las enfermedades psiquiátricas y somáticas posteriores“, agregó la especialista.

Para la investigación, el equipo examinó a cerca de 1,5 millones de menores suecos por 12 años. Al comienzo, tenían entre 5 y 19 años y, al término del estudio, tenían entre 17 y 31. Más de 37 mil de ellos habían sido diagnosticados con depresión alguna vez en su vida.

Un informe de la Escuela de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile, de autoría de la Dra. Ana Belén Reyes, señala que los trastornos depresivos en territorio nacional, “durante la infancia alcanzan una prevalencia de 2%, cifra que aumenta hacia la adolescencia llegando al 8%, y mostrando una distribución de 2:1 entre mujeres y hombres”.

En este sentido, señalan que el estudio sueco arrojó diferencias de género entre el futuro de los niños y adolescentes: las mujeres tienden a presentar infecciones urinarias, gastrointestinales y respiratorias; mientras, en los hombres suele aparecer la obesidad y anomalías en la tiroides.

Con todo, La conexión entre el trastorno y las enfermedades podría explicarse, según el informe, por la utilización de sustancias (drogas) y la ansiedad, aunque advierten que es necesario continuar investigando.

El sitio especializado Medline Plus advierte que la depresión es una “enfermedad clínica severa” que, en Estados Unidos, afecta a unos 19 millones de personas. Se estima que, en Chile, cerca de 850 mil padecen depresión. Se trata de cifras sumamente preocupantes, ya que Chile es el segundo país de la OCDE que más ha aumentado su tasa de suicidios durante los últimos 15 años.

Entre sus síntomas, según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, se encuentra:

1. Sentirse triste o “vacío”
2. Pérdida de interés en sus actividades favoritas
3. Aumento o pérdida del apetito
4. No poder dormir o dormir demasiado
5. Sentirse muy cansado
6. Sentirse sin esperanzas, irritable, ansioso o culpable
7. Dolores de cabeza, calambres o problemas digestivos
8. Ideas de muerte o de suicidio