La obesidad es una enfermedad que ha crecido peligrosamente en Chile. De hecho en nuestro país, el 74,2% de los adultos padece de sobrepeso u obesidad y muere una persona con obesidad por hora, según información del Ministerio de Salud de marzo de 2021. Somos parte de un grupo de pacientes que vivimos con obesidad y médicos dedicados al tratamiento de esta enfermedad crónica que se relaciona con más de 236 patologías, entre ellas, la de un mayor riesgo de 13 tipos de cánceres.

En este contexto urge que se aborde un proyecto que establezca la obesidad como enfermedad crónica, con cobertura financiera por parte del Estado e instituciones privadas de salud, y con un enfoque multidisciplinario que incluya la prevención, diagnóstico, tratamiento y seguimiento del paciente y de su familia, como ocurre en la atención primaria de salud.

Asimismo, la relación entre obesidad y salud mental es bidireccional. La evidencia apunta a que las personas con obesidad tienen 1,4 veces más riesgo de padecer depresión que una persona con peso normal. Entre los niños, además, se suma bullying escolar, mermas cognitivas, emocionales, sociales, motivacionales, entre otras. Todo lo anterior les afecta no solo a ellos, sino también a su entorno.

Por último, en 2019, el subsecretario Cristóbal Cuadrado realizó un estudio sobre el impacto económico y social de la obesidad en Chile, que estimó que para el año 2020, el 2,9% del gasto total en salud se destinaría al tratamiento de la obesidad y sus consecuencias. Por lo tanto, al declarar la obesidad como una enfermedad crónica podría liberarse parte de la carga económica de tratamientos mentales y físicos de otras enfermedades, optimizando los escasos recursos en salud en Chile. Hacemos un llamado a las autoridades y al Parlamento a avanzar en esta materia. ¡Es urgente contar con una ley de obesidad!

Magdalena Farías; Jaime González; Mariana Pellerano; Marco Gajardo; Alicia Cárdenas; y Marcela Alarcón, Equipo Obesidad en Chile: Prevenir, Tratar y Diagnosticar.

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