Sabía que estaba siendo buscado por la Policía de Investigaciones y por ello abandonó su hogar y partió a San Felipe a trabajar como temporero, hasta que ayer fue sorprendido y detenido por los detectives por su presunta responsabilidad en el incendio de la estación de Metro La Granja.

Son los hechos que se remontan al pasado viernes 18 de octubre, el día de inicio del estallido social, cuando varias estaciones del tren subterráneo fueron atacadas e incendiadas. Una de ellas La Granja, de la línea 4A, donde las boleterías, torniquetes y puertas fueron afectadas por el fuego.

La indagatoria de la BIPE de la Policía de Investigaciones ya había arrojado resultados el pasado 7 de noviembre, cuando un hombre de 33 años fue detenido por su presunta responsabilidad en los daños e incendio de la estación.

Sin embargo, durante la tarde de este lunes los detectives identificaron y detuvieron a un segundo implicado que sería el principal autor de los hechos, según explicó el fiscal Héctor Barros, de la Fiscalía Metropolitana Sur.

Se trata de un joven de 20 años, sin antecedentes policiales y que vivía a solo un par de cuadras de la estación, pero que al percatarse que la PDI ya había detenido a uno de los presuntos responsables decidió irse a trabajar como temporero estas últimas dos semanas, de acuerdo a lo detallado por el comisario Juan Pardo, de la Brigada de Investigaciones Especiales.

El imputado pasará este martes a su control de detención, donde la Fiscalía Metropolitana Sur presentará la evidencia de su participación a través de cámaras de seguridad y declaración de testigos, y será formalizado por los delitos de incendio y daños.