Fue revocada la prisión preventiva del conductor que protagonizó un fatal accidente el año pasado, en el que murió una joven estudiante de enfermería de la Universidad San Sebastián en Concepción, región del Bío Bío.

De esta forma, Eduardo Rodríguez Urzúa esperará en arresto domiciliario el juicio simplificado que ya decidió la Fiscalía, al estimar una eventual pena inferior a los 5 años de cárcel.

Al cumplirse exactamente nueve meses desde el accidente en la esquina de calle Rengo con avenida Los Carrera, el Juzgado de Garantía de Concepción cambió la prisión preventiva por arresto domiciliario total para el joven que manejaba el vehículo que colisionó con un taxibús, causando la muerte de Camila Candia Oliva.

La joven de 21 años, alumna de la Universidad San Sebastián, era pasajera en el auto que conducía Eduardo Rodríguez Urzúa, formalizado por el delito de manejo en estado de ebriedad causando la muerte, por lo que el Ministerio Público invocó la Ley Emilia.

La resolución del tribunal fue recibida con desazón por la madre de la víctima, María Elena Oliva, subrayando la gravedad de la conducta del responsable de la muerte de su hija.

Para solicitar la revisión de la prisión preventiva, el abogado defensor del imputado, Marcelo Villena, argumentó el actual escenario de pandemia, presentando un certificado médico sobre enfermedades de base de su cliente y también lo señalado por la Corte Suprema sobre el riesgo que ingrese el Covid-19 a los penales.

Tras decretar el el juez Iohan León la libertad de Rodríguez para que siga en su hogar el arresto, el abogado de la madre de Camila, Diego Seguel, decidió apelar la resolución y buscar que la corte envíe al imputado de vuelta a la cárcel.

Señalar que la Fiscalía no se opuso al cambio de la cautelar, pues al decidir un juicio abreviado en el caso admitió que Eduardo Rodríguez no enfrentaría una pena de cárcel superior a los 5 años y que por lo tanto podría cumplirla en libertad.