La Superintendencia de Salud presentó una querella en contra del agente de ventas que afilió a una joven a la isapre Consalud sin su consentimiento.
Los hechos se remontan a inicios de agosto del presente año cuando Nicole Ulloa contactó a un trabajador a través de WhatsApp para solicitar una evaluación para ingresar a la institución de salud previsional.
Días después recibió una carta de la isapre con información de Garantías Explícitas en Salud (GES), lo cual llamó su atención ya que nunca firmó un contrato. Sin embargo, quien sí lo hizo fue el ejecutivo, el que falsificó su firma y huella digital para afiliarla sin su consentimiento.
De acuerdo a lo informado por la Superintendencia de Salud, el ejecutivo que realizó el contrato renunció a la compañía. Además indicaron que presentaron una querella en su contra, según detalló Christian Henríquez, agente regional del organismo.
“Esta querella busca determinar la responsabilidad porque el agente de ventas habría cometido un delito al falsificar la firma y adulterar la huella”, explicó Henríquez.
Paralelamente existe un proceso sancionatorio contra el exagente, el que podría terminar con su eliminación del registro para evitar que se desempeñe en otra isapre.
Durante el proceso de fiscalización se revisaron los contratos del cuestionado ejecutivo, con un rango desde 2017 a la fecha donde al menos dos también presentarían irregularidades.
“Estamos revisando algunos contratos del mismo agente de ventas que nos parece que podría haber una sospecha de que también podría existir alguna irregularidad, pero eso todavía está en investigación”, afirmó.
La afectada recibió el reembolso por el monto de dinero que le descontaron por estar afiliada a la isapre, pero le informaron que en su última liquidación nuevamente estaría el descuento.
Desde la Superintendencia de Salud agregaron que ya se realizó una fiscalización en las distintas isapres de la zona, agregando que deberán elaborar un informe con los resultados.
