El inspector de incógnito que fue agredido el pasado jueves en un taxibus de la empresa Translota en Coronel para fiscalizar el recorrido calificó la situación “terrorífica”: presentó una denuncia por 4 posibles delitos tales como lesiones, amenazas, daños y eventual secuestro mientras Carabineros le mostró su apoyo.

La Seremi de Transportes no tiene antecedentes de este tipo de hechos pero lo ocurrido supondrá cambios a la hora de fiscalizar a los taxibuses del recorrido Coronel-Lota, según informó el titular de la cartera en la zona, César Arriagada.

Los funcionarios de fiscalización cursaron una multa contra el chofer, apodado “El Schumacher”, por negarse a la fiscalización y por la agresión.

El conductor, además registra una condena por amenazar de muerte en 2015 a una carabinera que lo fiscalizó en la avenida Tucapel de Concepción, por lo que fue condenado a 61 días de presidio menor en su grado mínimo.

Distintas versiones

El funcionario aseguró que subió al taxibus en Coronel, canceló su pasaje y realizó el viaje hasta Concepción sin identificarse como trabajador de la Seremi.

El afectado contó que explicó que era fiscalizador cuando el auxilar del taxibus le pidió bajar de la micro porque terminarían antes el recorrido.

Justamente la fiscalización se realizó por una denuncia de incumplimiento de trazado en este recorrido pero la versión que el chofer, Ricardo Carboni, entregó a La Radio es diferente.

El acusado aseguró que el inspector se presentó como tal al subir en el centro de Coronel e incluso no le cobró pasaje.

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“Él por ahí se pasó a lastimar en un fierrito que hay en la misma micro de mi propiedad”, dijo, intentando explicar la lesión que habría dejado al inspector en estado de shock.

El viaje terminó en el terminal de la línea de buses ruta 160, donde el conductor del taxibus le quitó al inspector el celular con el cual lo grababa para contar con un registro de lo ocurrido. En medio del forcejeo, el fiscalizador terminó con un dedo lesionado y actualmente está con licencia médica.