La Fiscalía estimó en cerca de 300 los participantes de una fiesta clandestina realizada en Quellón, en la provincia de Chiloé.

La fiscal Karyn Alegría se refirió al bullado caso que mantiene preocupadas a las autoridades de la zona por el aumento de contagios.

El evento tuvo lugar en el sector Chaiguao y, según la Autoridad Sanitaria, varias personas dieron positivo por coronavirus y se teme un brote mayor.

La persecutora sostuvo que cerca de 300 personas asistieron al lugar y, entre ellas, cuatro que eran positivo a la pandemia.

Este lunes, la Armada presentará los antecedentes de la investigación que desarrollaron y donde pudieron establecer la identidad del organizador y el dueño del local.