De visita en Osorno, el ministro de la Corte Suprema Carlos Cerda Fernández, se reunió con funcionarios de los tribunales de justicia en medio de la campaña “la alegría de acoger”, que busca humanizar el juzgado de primera instancia, que es donde la víctima recibe la primera ayuda.
En conversación con Radio Bío Bío, el ministro explicó que el máximo tribuna del país está consciente que en los 476 juzgados de Chile es donde se produce el primer contacto directo entre la comunidad y el poder judicial, encarnado en los funcionarios, por lo tanto la cruzada que actualmente realiza tiene por fin motivarlos a ser cada día aún más cercanos.
La idea, es que quien acude por ayuda, salga del recinto judicial con cierta satisfacción al ser escuchado y asistido en óptimas condiciones al ser tratado de igual a igual.
Por ello, dijo además de reunirse con los funcionarios y orientarlos en cómo humanizar aun más el sistema -no significa que no lo esté añadió- también tuvo la oportunidad de conversar con quienes acudían a las audiencias programas para luego participar de las mismas instancias y poder ver in situ si los usuarios se retiraban satisfechos con la atención y resolución obtenida y por sobre todo, si entendían tales fallos, sobre todo los imputados.
Ahora bien, dijo, siempre se puede mejorar y llegar a la excelencia y ahí la razón de la campaña y de la “cruzada” que lo mantiene recorriendo casi medio millar de recintos ubicados a lo largo del país.
Esta calidad, dijo, supone que se cumplan los objetivos de los procedimientos reformados, que son principalmente que la gente sea escuchada, que se vaya tranquila por que pudo exponer tranquilamente y fueron escuchados.
En esa línea, el ministro de la Corte Suprema, hizo un llamado a la comunidad a sentir la confianza de acercarse a un tribunal a buscar ayuda u orientación, ya que -insistió- serán atendidos sin ser juzgados de manera previa.
El poder judicial entrega un servicio donde la cercanía con la comunidad debe ser prioritario. De esa manera, la Corte Suprema y su presidente Hugo Dolmestch tienen la convicción que se está construyendo democracia judicial.
La república de Chile debe tener en su rama del poder judicial -compuesta exclusivamente por jueces- humanidad y sentimiento para brindar una democracia sana, puntualizó.