El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, junto al director nacional de la PDI, Héctor Espinosa, y el fiscal regional de La Araucanía, Cristián Paredes, entregaron mayores antecedentes acerca del operativo en Ercilla, en que un detective resultó fallecido tras un ataque.

El policía falleció por impactos de bala tras un trabajo en conjunto con el Ministerio Público, en el que 8 funcionarios de la PDI resultaron lesionados.

“Aquí hay tráfico de droga, hay armas de fuego ilegales y hay asesinos. Lo que corresponde es que estas personas sean puestas a disposición de la justicia y cumplan las condenas cuando los tribunales así lo indiquen”, aseveró el subsecretario.

El representante del Gobierno indicó que no descansarán hasta que se determine a los responsables de estos crímenes y se les ponga frente a la justicia.

El fiscal regional del Ministerio Público en La Araucanía, Cristián Paredes, también lamentó los hechos y aseguró que “No resulta normal ni menos tolerable que en un Estado de Derecho un funcionario público muera cumpliendo su deber”.

Antecedentes del operativo

Desde hace más de 8 meses a esta fecha que la PDI y el Ministerio Público comenzaron la investigación que incluyó diversos delitos, tales como fue el tráfico de drogas y armas, cultivo de cannabis y homicidio consumado entre bandas rivales en Collipulli.

Según detalló, no hay antecedentes de civiles lesionados, mientras que hasta el momento se contabilizan más de 700 kilos de marihuana, más de 10 kilos de marihuana procesada y unos 7 millones de pesos, luego de acceder a cinco domicilios establecidos como blancos investigativos.

Cerca de 800 funcionarios de la Policía de Investigaciones participaron en el operativo de allanamiento.

Fuentes de Radio Bío Bío señalan que incluso el contingente policial pernoctó en el estadio de Angol, para no levantar sospechas por el operativo.