La mañana se este miércoles, la justicia rechazó dejar en prisión preventiva a Martín Pradenas, investigado por cuatro delitos sexuales cometidos contra tres víctimas, entre ellas, Antonia Barra, joven que se suicidó en 2019 en Temuco, en la región de La Araucanía. Desde la Asociación de Abogadas Feministas de Chile, Abofem, criticaron lo dictaminado por el juez.

Durante la audiencia, el juez Federico Gutiérrez del Juzgado de Garantía de Temuco, rechazó lo solicitado por la Físcalía, argumentando que las pruebas no permiten establecer la existencia de los delitos, además de la irreprochable conducta anterior del acusado.

El juez desestimó la existencia de 3 de los 4 delitos que quedaban tras el sobreseimiento por prescripción de dos causas, dando sólo por acreditada la violación de Antonia Barra.

De esta manera, Martín Pradenas quedó con arresto domiciliario total, arraigo nacional y prohibición de acercarse a las víctimas.

La resolución se ajustó a lo solicitado por el abogado defensor del investigado, aunque se agregó que en caso de que no ser cumplida se modificará la cautelar a prisión preventiva.

Esta disposición de la justicia ha sido cuestionada desde diversos sectores, tal es el caso de la Asociación de Abogadas Feministas de Chile, Abofem, cuya directora ejecutiva, Bárbara Sepúlveda Hales, sostuvo que si bien se puede apelar a lo dispuesto por el juzgado, lo acontecido hoy en el marco del Caso Antonia Barra pone en evidencia algo que pasa siempre, ya que no existe perspectiva de género para abordar delitos sexuales.

La directora ejecutiva de Abofem, sostuvo que basta con recordar casos emblemáticos y el trato que se le ha dado a las víctimas de violencia de género, como la exposición pública de la vida sexual de Nabila Rifo y al juicio moral al que fue sometida durante el juicio.

Bárbara Sepúlveda Hales, sostiene que hoy el sistema -y sus falencias- han quedado en evidencia, nuevamente, debido a un caso mediático.

Agrega que miles de personas siguieron en vivo la audiencia y lograron darse cuenta de los sesgos, estereotipos y humillaciones a las víctimas por algunos de los intervinientes.

De esta forma, miles de mujeres hoy vieron reflejadas en la audiencia sus propias experiencias, sus abusos y violaciones. Sepúlveda señala además, que en el caso de Antonia Barra, la expectativa de justicia es simbólica, ya que es la justicia que anhelan esas mujeres y que ahora ven que nunca llega.