Un total de 11.305 hectáreas de bosque nativo han sido consumidas por los incendios forestales en la región de Aysén.

En medio de cuestionamientos por un actuar tardío y a 10 días de decretada la emergencia, el Gobierno arribó a la zona afectada por los dos incendios forestales contenidos y descartó demora en la emergencia, culpando a la geografía propia del sector.

El fuego atacó el sector de Colonia Sur, en la comuna de Cochrane, junto al incendio de Bahía Mansa, en Chile Chico.

Así lo confirmó el último catastro entregado por la Onemi, que además constató que la superficie afectada es de un 80% en relación a los otros siniestros activos, que van desde el Maule hasta Aysén.

Luego de sobrevolar la zona, el ministro de Defensa, Alberto Espina, descartó retraso en la llegada de equipos técnicos y apuntó a las complicaciones geográficas del sector.

El alcalde de Cochrane, Patricio Ulloa, moderó el tenor de las críticas hacia el Ejecutivo, pero pidió la pronta llegada del ministro de Agricultura, Antonio Walker, para evaluar los daños medioambientales en la zona.

Agrupaciones medioambientales manifestaron su preocupación ante la destrucción de sectores de biodiversidad. La coordinadora de Campaña de Greenpeace, Estefanía González, llamó al Gobierno a asumir una postura frente al cambio climático.

Finalmente, el Gobierno confirmó que continuará operando la aeronave Ten Tanker por los días que resulte necesario, debido a que los focos podrían tardar meses en ser extinguidos.

Jonas Gómez | Agencia UNO
Jonas Gómez | Agencia UNO