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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

A tres meses del cambio de Gobierno, la administración de Gabriel Boric se enfoca en impulsar proyectos prometidos durante la campaña que aún están en curso en el Congreso. Iniciativas como el fin del CAE y la creación de un nuevo sistema educativo, así como la Ley de Seguridad Económica y la Ley de Inteligencia, están en espera.

A tres meses del cambio de Gobierno, la administración de Gabriel Boric, pretende encausar sus esfuerzos por empujar proyectos comprometidos en campaña pero que aún están en tramitación legislativa en el Congreso.

A pocas horas de la segunda vuelta presidencial, el ministro del Interior, Álvaro Elizalde, salió a enfrentar los tiempos y plazos que tienen iniciativas de La Moneda, pero que aún están entrampadas en el Parlamento.

Es el caso del fin al Crédito con Aval del Estado (CAE) y que crea un nuevo sistema de financiamiento de la educación superior, sumado al proyecto de Sala Cuna para Chile. Ambas iniciativas aún están en trámite.

Sin embargo, el tema de seguridad preocupa a distintos sectores políticos, ya que proyectos como las Reglas de Uso de la Fuerza (RUF) o la Ley de Inteligencia, todavía restan y se ven lejanos en obtener luz verde.

Consultado por La Radio, el jefe del gabinete, puso el foco en la agenda de seguridad y puntualmente con la Ley de Inteligencia Económica, que vendría a perseguir la ruta del dinero y que permitiría sancionar penalmente a los cabecillas de bandas y crimen organizado.

El diputado de Amarillos, Andrés Jouannet, aseguró que el proyecto de Ley de Seguridad Económica sigue su curso, pero apuntando al Gobierno, que, su juicio, sólo quiere hacer un punto político.

El ministro Elizalde emplazó al Congreso a discutir con celeridad estos proyectos inconclusos para materializarlos o queden con un avance considerable antes que termine el Gobierno, el 11 de marzo próximo.

Esto, en la recta final de la administración de Gabriel Boric, donde cada vez se evidencia más el síndrome del “pato cojo”, lo que se acrecentará aún más, cuando el domingo que conozca a quien ocupará el sillón de La Moneda.