El Ministerio del Interior informó la mañana de este sábado que el pasado jueves aterrizó en Santiago un vuelo chárter con 31 ciudadanos chilenos deportados desde Estados Unidos, en el marco de un procedimiento coordinado por distintas instituciones del Estado.
Según detalló el ministro de la cartera, Álvaro Elizalde, entre los retornados se contabilizan 23 hombres y 8 mujeres. Además, precisó que tres de estas personas mantenían órdenes de detención pendientes, por lo que fueron puestas de inmediato a disposición de la justicia chilena.
“El procedimiento se enmarca en un trabajo coordinado entre los ministerios del Interior, Relaciones Exteriores y Seguridad Pública, junto con la Policía de Investigaciones, el Servicio de Registro Civil y otras instituciones del Estado, con el objetivo de asegurar un regreso ordenado”, explicó la autoridad.
Elizalde subrayó que con este nuevo vuelo, los chilenos deportados en vuelos chárter desde Estados Unidos durante la administración del presidente Donald Trump asciende a 155 personas, a las que se suman 21 que han llegado en vuelos comerciales, llegando a un total de 176 compatriotas.
No obstante, puntualizó que la política de expulsiones del país norteamericano “no está dirigida específicamente a Chile, sino que se aplica de manera general a todos los países”.
Respecto al procedimiento en Chile, el titular de Interior aclaró que “al arribo de los vuelos se realiza el proceso de control migratorio, se verifica la identidad y la situación judicial de cada persona retornada, y quienes registran órdenes de detención vigentes son puestos inmediatamente a disposición de la justicia”.
Finalmente, el ministro reafirmó el compromiso del Ejecutivo, señalando que “desde el Ministerio del Interior reiteramos nuestro compromiso con la seguridad pública y el respeto al Estado de Derecho, trabajando estrechamente con las autoridades nacionales e internacionales para asegurar que estos procesos se realicen de forma ordenada y conforme a la ley”.
Cabe destacar que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), informó que en lo que va del Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, se ha deportado a casi 600.000 inmigrantes.
De todas maneras, el último reporte de la organización Transactional Records Access Clearinghouse (TRAC), de la Universidad de Syracuse en Nueva York, muestra que para finales de agosto el número total de extranjeros arrestados por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) parecía haberse estancado a finales de agosto.
El número de arrestos diarios fue de 1.055 en agosto, un 14 % menos que el promedio de junio, cuando esa cifra ascendió a 1.124 arrestos, según cifras el informe de la organización, basado en cifras oficiales.
De esta forma, el ICE está aún muy por debajo del nivel de 3.000 arrestos diarios ordenados en mayo pasado por la Casa Blanca, lo que aleja a las autoridades de haber detenido a alrededor de 600.000 inmigrantes y que fueran deportados.
El DHS ha estado bajo presión de cumplir las metas de la mayor deportación nunca antes vista en Estados Unidos prometida por el presidente Trump a su llegada a la Casa Blanca.