El Gobierno Regional del Bío Bío no solicitó boletas de garantía a la Fundación Chinquihue, a la cual le traspasó 1.500 millones de pesos para iniciativas enfocadas en pescadores artesanales locales. Eso sí, la dinámica fue modificada luego que se elevaran los estándares de probidad.

El Gobierno Regional del Bío Bío admitió no haber solicitado boletas de garantía a la Fundación Chinquihue, decisión revertida ahora después de elevar los estándares de probidad para este tipo de convenios.

Sobre la ejecución del proyecto, sectores de la pesca artesanal denuncian que la ayuda entregada hasta ahora no se condice con los montos involucrados.

A la Fundación Chinquihue, de la región de Los Lagos y presidida por el gobernador de esa zona, Patricio Vallespín, el GORE Bío Bío transfirió 1.500 millones de pesos para tres iniciativas dirigidas a los pescadores artesanales locales.

Desde el año pasado que este proyecto ha sido cuestionado por sectores a quienes justamente debe beneficiar y entre las críticas está el que se haya aprobado sin una boleta de garantía que resguarde el buen uso de los fondos.

Desde el Gobierno Regional, si bien se admitió no haber requerido inicialmente una póliza de fiel cumplimiento, debido al carácter público-privado de la fundación, tras mejorar los niveles de fiscalización de este tipo de convenios, ahora fue solicitada la boleta de garantía, estando la repartición a la espera del documento.

Sin embargo, esa no es la única duda de algunos pescadores artesanales, apuntándose a supuestas irregularidades con aspectos de la iniciativa, que contempla, entre otros beneficios, la entrega de módulos para el procesamiento de la pesca.

De acuerdo a lo señalado por una persona líder del sector, quien pidió reserva su identidad, los 750 millones de pesos para la primera etapa del programa no se ven en lo que están recibiendo las pescadoras, que además, dijo, estarían siendo seleccionadas a dedo y no por los requisitos que se había estipulado.

La respuesta desde el Gobierno Regional es que además de los módulos, a los beneficiarios se les apoya en la iniciación de actividades y la obtención del permiso sanitario, y se les capacita en la trazabilidad ante el Sernapesca.

Por su parte, otra dirigenta de la pesca artesanal, Sara Garrido, descartó los cuestionamientos, asegurando que ellos, como quienes pidieron al GORE la aprobación de la Fundación Chinquihue y el proyecto, han fiscalizado el buen uso de los dineros y la entrega de los beneficios.

Otra crítica, que primero lanzó la Federación de Pescadores Artesanales el año pasado, tiene que ver con la selección de una fundación ajena al Bío Bío, asegurándose que en la región hay entes con la misma experiencia.

Al respecto, y sobre los beneficios, el dirigente Hernán Cortés señaló que lo que a ellos les preocupa es que cualquier iniciativa abarque el mayor número de pescadores, siendo facultad del GORE la elección de los capacitadores.

Hasta ahora, de acuerdo a los datos entregados por el Gobierno Regional, han postulado 180 pescadores, 30 de ellos ya aceptados y 11 en lista de espera, de las caletas de Rocuant, Lota y Llico, previéndose que el programa beneficie además indirectamente a otras 150 personas.