Pese a las duras críticas, tanto de oposición, como desde el propio oficialismo, el presidente Gabriel Boric no quería removerlo de su cargo, lo que muchos atribuían a la cercanía entre ambos.

Una reservada comida en un restaurante en Valparaíso, terminó por sellar la salida de Fernando Araos desde la Subsecretaría de Redes Asistenciales, en medio de la crisis generada por el brote de virus respiratorios.

Y es que pese a las duras críticas, tanto de oposición, como desde el propio oficialismo, el presidente Gabriel Boric no quería removerlo de su cargo, lo que muchos atribuían a la cercanía entre ambos.

La mayoría de los parlamentarios de Socialismo Democrático y de Apruebo Dignidad, no se explican por qué el Presidente de la República no tomaba la decisión. Incluso, Araos estaba preparando su intervención en el Congreso, la que tenía que producirse en el día de ayer.

Entre los argumentos para mantenerlo, se decía que no era el momento para hacerlo, que quizás habría que esperar a pasar el invierno.

Pero sobre todo que daba la impresión de que el Gobierno había trazado una línea y que la salida de Araos podría abrir la puerta a las fuerzas de oposición para que se “engolosinaran” con querer quizás sacar a la ministra o quizás a otro ministro de Estado o un subsecretario, que no lo esté haciendo bien.

La comida de Aguilera con diputados oficialistas que terminó por sentenciar la salida de Araos

En medio de las dudas, el pasado lunes la ministra Aguilera tuvo una sincera conversación junto a parlamentarios del oficialismo, en una comida en el restaurante Portofino.

Sin embargo, en ese encuentro la secretaria de Estado constató que no había espacio político al interior de la propia coalición para que Araos siguiera.

A esto se suman las advertencias desde los partidos de derecha de presentar una Acusación Constitucional en contra de la ministra Aguilera. Aunque, al menos desde la UDI y RN descartaron apoyar el juicio político que estaba impulsando el Partido Republicano, siempre y cuando se tomaran medidas con Araos.

En esa comida estuvieron Jaime Sáez, de Revolución Democrática; la exministra Helia Molina, del PPD; Francisca Bello, de Convergencia Social; Danisa Astudillo, del Partido Socialista; la humanista Ana María Gazmuri, que ya había sido enormemente crítica; el radical Tomás Lagomarsino, también muy crítico a la gestión de Araos; Hernán Palma, del Partido Humanista; y Matías Ramírez, del Partido Comunista.

De hecho, antes del anuncio del Presidente Boric, ya se daba por hecho la salida del ahora exsubsecretario, aun cuando todavía el mandatario no lo anunciaba oficialmente, con parlamentarios entregando reacciones.

En sectores del oficialismo consideraban a Araos un “tapón”, por lo que su salida era vista como una medida necesaria para ayudar a descomprimir el ambiente, argumentándose además que se había politizado en exceso la crisis sanitaria, con una oposición muy a la ofensiva.

Recordemos que la crisis por la gestión de camas críticas no es lo único que le cuestionaban al exsubsecretario, sino que además había un tema de preparación de la Campaña de Invierno y la solicitud de recursos a la Dirección de Presupuesto.

En todos estos caminos Araos es considerado el responsable, aunque habrá flancos que van a seguir.

Incluso, tras su salida, hubo un comunicado de una Asociación de Funcionarios de la Subsecretaría de Redes Asistenciales en donde describieron un escenario muy complejo en términos de condiciones laborales, computadores en mal estado, malas condiciones de trabajo, reducción de personal, reducción de contratos, situaciones que no se van a desactivar solo con Araos dejando su cargo.

El protagonismo del presidente Boric en el anuncio de salida de Araos

Pero también, llamó la atención el que haya sido el propio Jefe de Estado quien saliera a comunicar la salida de Araos, en una alocución donde además entregó datos acerca de lo que están haciendo en el Ministerio de Salud respecto de la situación de las camas críticas pediátrica.

Recordemos que cuando se produce un cambio de subsecretarios, se informa a través de un comunicado de prensa. No hay mayor despliegue a diferencia de un cambio de gabinete de ministros o ministras, donde efectivamente hay una ceremonia.

Así, no deja de llamar la atención que es un gabinete que sigue siendo tan débil que, incluso a la salida de un subsecretario muy importante, debilite la figura del presidente Boric.

De todas maneras, el anuncio de la salida del subsecretario generó un alivio en las huestes oficialistas, abriendo un escenario en donde, en menos de tres horas, ya el Gobierno dio vuelta a la página, empezando a hablar de medidas como el uso de mascarilla y del posnatal de emergencia.

En síntesis, lo que busca el Gobierno, el oficialismo y también la oposición, es empezar a concentrarse en lo que importa ahora, en tratar de deshacer los errores que se cometieron ante un invierno que puede que sea muy duro.