Esta semana, el presidente Gabriel Boric cumplirá un año en el cargo, y se espera que antes del 11 de marzo se realice un nuevo cambio de gabinete. Ad portas de que eso ocurra, continúa instalada la alerta en el Partido Comunista, respecto al cumplimiento del programa de gobierno del mandatario.

Este sábado se cumplen 365 días desde que el presidente Gabriel Boric asumió su cargo, en el Congreso pleno, en medio de presiones para un eventual cambio de gabinete.

Y ha pasado mucha agua bajo el puente durante su primer año de mandato, lo que no le permitió tomar el control absoluto de su programa de gobierno.

Lo más relevante -y que afectó directamente al corazón del Ejecutivo- fue el resultado del plebiscito constitucional, por lo que se debió replantear el rumbo de la agenda, considerando que su programa estaba sujeto a muchas cosas que se plantearon en el rechazado borrador de nueva Constitución.

Y así fue como el Gobierno de Gabriel Boric debió moverse al centro, y recurrir a figuras con mayor experiencia política, que hoy están muy bien evaluadas, considerando su capacidad de gestión al interior de La Moneda.

Y precisamente a eso ha querido apuntar la ministra del Interior, Carolina Tohá, quien ha reiterado que en esta segunda etapa, el Gobierno debe profundizar en sus prioridades, según lo planteó en conversación con La Radio.

Las presiones de Socialismo Democrático para un cambio de gabinete

Cuando se realizó el primer cambio de gabinete, Apruebo Dignidad temía que se viviera lo ocurrido con el gobierno de la expresidenta Michelle Bachelet: un nuevo realismo sin renuncia.

Y justamente hoy, con un inminente cambio de gabinete, y presiones de Socialismo Democrático para obtener mayor representación en subsecretarías y cargos regionales, es que voces del Partido Comunista siguen levantando la alerta.

Y no solo en la directiva de esa colectividad, sino que también en el parlamento.

El diputado de ese conglomerado, Matías Ramírez, quien ha sido crítico en algunas ocasiones, planteó que en este segundo año de mandato el Presidente debe respetar su programa, ya que fue elegido bajo este.

No obstante, al ser consultado por el eventual cambio de gabinete, durante la semana el mandatario aseguró que “no me siento presionado”.

Pero el mismo lunes, la vocera Camila Vallejo puso énfasis en esta arista: señalaba que no correspondía referirse a un cambio de gabinete, pero que era importante que este proceso sea sin presiones, ya que es una atribución exclusiva del Presidente de la República.

Socialismo Democrático, principalmente el Partido Socialista, ha peleado para abarcar más subsecretarías.

El senador de esa tienda, Alfonso de Urresti, puntualizó en esta materia; y sostuvo que es necesario un cambio de gabinete desde lo sectorial, haciendo una buena evaluación del equipo político del Mandatario.

El complejo panorama de Revolución Democrática

Al senador de RD Juan Ignacio Latorre -presidente de la colectividad- se le vio dos días en el Palacio de La Moneda: el lunes y el viernes.

Esta colectividad está en una posición compleja, que se suma a la que ya viven, que es la falta de representación en el comité político.

En ese sentido, suenan rumores de que podría salir del gabinete el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, que milita por el partido; y siempre está el temor de que Giorgio Jackson finalmente salga del gabinete, lo que es poco probable.

En ese sentido, Latorre planteó que no se trata de pugna de poder, sino más bien de priorizar la capacidad de trabajar en conjunto.

Cabe destacar que entre los ministros más apuntados se encuentran la canciller, Antonia Urrejola, y el titular de Desarrollo Social, Giorgio Jackson.

Según la encuesta Cadem publicada el 19 de enero, junto a Nicolás Grau, Urrejola y Jackson son los ministros peores evaluados por la ciudadanía.