Los diputados de Renovación Nacional, Cristóbal Urruticoechea y Harry Jürgensen, enviaron un oficio a la Universidad de Chile para que explique sobre los cursos de "estudios de género y feminismo" que imparten, pidiendo incluso individualizar a quienes dan clases, lo que fue calificado por la casa de estudios como una "suerte de inquisición".

Los diputados de Renovación Nacional (RN), Cristóbal Urruticoechea y Harry Jürgensen, enviaron un oficio a la Universidad de Chile, para que explique los cursos, centros programas y planes relacionados con los “estudios de género, ideología de género, perspectiva de género, diversidad sexual y feminismo”.

En el mismo oficio, piden a la Casa de Estudios detallar las características de estos cursos, individualizar a los “funcionarios o docentes que estén a cargo de ello” y que se informen los recursos utilizados para financiar estos programas.

La situación generó molestia en la Universidad de Chile, luego que la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones, emitiera un comunicado acusando que el oficio es una especie de inquisición similar a países con gobiernos de ultraderecha.

“La Dirección de Igualdad de Género de la Universidad de Chile, la Unidad de Género de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo, y el Archivo Central Andrés Bello, preocupados por promover la igualdad de género tanto en la propia institución como en los más diversos ámbitos de la sociedad, declaramos nuestra mayor alarma por las connotaciones de esta suerte de inquisición, ya que hemos conocido recientemente cómo en países gobernados por sectores ultraconservadores se han producido dañinas intervenciones en las instituciones de educación superior, especialmente en las áreas de humanidades y muy agudamente en aquellas que les incomodan más pues investigan, reflexionan y enseñan temas que esos sectores prefieren mantener en la oscuridad”, indica el comunicado.

En la misma línea, acusan que las intervenciones a las universidades comienzan “con tergiversaciones y acusaciones de ideologización”, agregando que “ideología de género es un término que se ha usado para denostar los estudios sobre feminismos que son abordados en la academia como ‘teoría crítica’, como clave de análisis del género, lo que ya es parte del pensamiento contemporáneo y nunca una ideología”.

Además, desde la Universidad de Chile sostienen que este tipo de “acusaciones” después pasan a ser controles presupuestarios y posteriormente un ataque a la autonomía universitaria.

“Rechazamos toda forma de censura, de vulneración a la libertad de cátedra y restricciones a la plena autonomía universitaria, pues de prosperar impedirían el pensamiento y producción de saberes sin restricciones, condiciones imprescindibles para la generación de conocimiento que aporte a la soberanía y a la emancipación”, añaden.

“Tenemos la certeza de que la Universidad de Chile, en su diversidad y pluralismo, seguirá el camino ya iniciado de compromiso con la igualdad de género y sintonía con la sociedad, más allá de los afanes autoritarios y macartistas de quienes quisieran una universidad pública acrítica y disminuida”, finaliza el comunicado.