Edison Krause, es ginecólogo y especialista en cirugía endoscópica de alta complejidad. En 2019 formó parte los expertos e integrantes de la Sociedad Chilena de Endometriosis que se reunieron con representantes del Gobierno y Fonasa para codificar dicha enfermedad en el sistema de salud, de modo de facilitar el acceso a la laparoscopia, cirugía que la remedia.

Sin embargo, hasta hoy, no existe solución.

Quienes hoy padecen la afección -que provoca un intenso dolor menstrual, difícilmente aplacado por medicamentos, y que puede derivar en problemas para tener hijos- deben debatirse entre largas listas de espera en el sistema público o altos costos en el sistema privado para ser sometidas a la intervención.

“Un día de cama que cuesta, no sé, 200 mil pesos en una clínica, Fonasa ayuda con 10 mil pesos. A ese nivel estamos hablando”, se lamenta Krause.

Conviven con el dolor

-Ya sabemos lo que es la endometriosis y lo hemos hablado hace algunos años, pero ¿en qué deben fijarse las mujeres para saber que tienen esta enfermedad?

-El principal problema que tenemos es la normalización social del dolor en el periodo menstrual. No es normal que el periodo menstrual tenga un gran dolor. Los otros síntomas asociados son, por ejemplo, dolor para tener relaciones sexuales, normalmente cíclico coincidente con la regla; dolor para defecar; y al final dolor pélvico en cualquier parte del ciclo que es muy importante, que interfiere con su vida normal, que provoca ausentismo laboral, por ejemplo. Eso es lo más importante.

Hay otros síntomas asociados a la endometriosis que nos deben hacer poner atención, por ejemplo, la imposibilidad de tener hijos sin una causa muy clara.

-Estamos hablando de que son pacientes que conviven con el dolor ¿es el dolor una manifestación universal de la endometriosis?

-La gran mayoría de las pacientes con endometriosis tienen dolor. Algunas pueden tener menos dolor o normalizar el dolor o un dolor crónico tolerarlo bien, pero el dolor es fundamental y afecta todos los ámbitos de la vida de las personas tener un dolor crónico, entonces ese es el mayor problema. Ahora, hay complicaciones con algún tipo de endometriosis, como la endometriosis profunda que puede producir obstrucción en los uréteres, pérdida de algún riñón y obstrucción del tubo digestivo, son menos pero también existen. Pero el dolor acompaña todos los aspectos de vida de la paciente.

-En marzo de 2019 habíamos informado sobre avances en el objetivo de codificar la endometriosis en el sistema público de salud. Tuvo reuniones con el entonces ministro de Salud, Emilio Santelices, Fonasa y parlamentarios.

-Nosotros, hace algunos años, estábamos trabajando en la posibilidad de conseguir que la endometriosis sea codificada por el sistema de salud de Fonasa, que es lo que rige a todo el sistema de salud, porque un código de Fonasa aplica para las pacientes que tienen Isapre también. De tal modo que cuando no existe ese código en Fonasa no existe en la Isapre y por lo tanto tratan ahí de no reembolsarte las prestaciones, lo que es un tremendo problema para las pacientes.

Lo otro es que en los hospitales públicos son cirugías de lo más complejo que hay en ginecología, pero no tiene un código específico de cirugía la endometriosis profunda. Entonces lo que nosotros hacemos es pegar y parchar otros códigos que existen y que son totalmente anacrónicos y de esa manera podemos codificar la cirugía de la endometriosis.

Ese es un gran problema, porque también en el sistema público los diagnósticos están asociados a ciertos pagos por parte del Estado, entonces eso no se está pudiendo hacer y por esa razón es que nosotros, desde hace ya unos tres a cuatro años, estuvimos haciendo gestiones en el Ministerio de Salud en Santiago, con el director de Fonasa y actualmente eso quedó como en stand by, por efecto de la pandemia. Pero la Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología actualmente está a cargo de llevar a cabo esas gestiones.

-¿Hubo avances en este tiempo?

-Concretamente, ninguno en la práctica. O sea, el código en Fonasa sigue igual que siempre.

Edison Krause, ginecólogo experto en endometriosis

Listas de espera “infinitas”

-¿Por qué con la pandemia se vieron más afectados?

-No solamente con la endometriosis, sino que muchas enfermedades en el sistema público tenía una cierta lista de espera mayor o menor. En el caso de la endometriosis se suma a que por ser una enfermedad compleja requiere que los equipos quirúrgicos estén muy entrenados para operar endometriosis y eso en el sistema público es todavía más difícil de conseguir.

De hecho, nosotros en el ámbito de las gestiones que estábamos en el Ministerio de Salud con la Sociedad Chilena de Obstetricia y Ginecología (Sochog) y un diputado local, empezamos a definir qué centros estarían capacitados para ofrecer una buena cirugía de endometriosis en el sistema público, porque en vista de que es complejo y no puede estar en todas partes, determinamos que en no más de ocho hospitales del país, podían ofrecer ese tipo de prestaciones y solución quirúrgica.

Acá, concretamente en el sur de Chile, donde se está ofreciendo esta solución quirúrgica, de acuerdo a la encuesta que hizo la Sochog, es en el Hospital Las Higueras de Talcahuano y en el Hospital Regional de Temuco, donde yo trabajaba hasta hace dos meses. Así de crítico es el problema que tenemos en el sistema público con esta enfermedad.

Ahora, cuando vino la pandemia, se detuvieron las cirugías en el sistema público, no esenciales, entre comillas. Entonces se priorizó las urgencias y los cánceres, entonces las listas de espera que ya teníamos, ahora son infinitamente más largas en cantidad y en el tiempo.

-En 2019 además habíamos hablado de centros asistenciales que podían tener dentro de sus prestaciones la laparoscopía, que es el procedimiento que soluciona esta enfermedad. Entre ellos estaba el Hospital de Padre Las Casas ¿hay alguna novedad con eso?

-Como la cirugía de la endometriosis es tan compleja, requiere gente muy entrenada, entonces luego de la encuesta de la Sochog, en el Hospital de Padre Las Casas estaba la idea de implementar el Centro de Endometriosis, porque teníamos los médicos interesados, los profesionales que estaban capacitados para trabajar ahí. En concreto, el proyecto se fue demorando por diversas razones de construcción del Hospital y de implementación después y luego vino la pandemia.

Hoy el Hospital de Padre Las Casas está dedicado, prácticamente, a pacientes con coronavirus, muchos pabellones se han reconvertido para usarlos como ventiladores mecánicos así que todavía estamos esperando irnos a trabajar y desarrollar el Centro en el Hospital de Padre Las Casas, pero no tenemos nada concreto con respecto a este tema.

-¿Cómo se resuelve esta lista de espera, considerando que la pandemia sigue?

-La solución inmediata es la priorización. Actualmente en tres hospitales de la red pública se están priorizando pacientes, pero localmente en Temuco no se priorizan las pacientes, a pesar de que son pacientes con la grave afectación de la calidad de vida, grave frustración de proyectos de vida, por ejemplo pacientes que no pueden tener hijos, pacientes que tienen dolor y múltiples consultas en el sistema de urgencias. Entonces estas pacientes en realidad deberían ser priorizadas.

-Y mientras tanto… ¿Qué pasa con las pacientes, qué hacen ellas?

-Mientras tanto no hay ninguna respuesta, no podemos resolverlas acá y es común en otras regiones. No estamos resolviendo a las pacientes en el sistema público, entonces la brecha que ya existía público/privado hoy es gigante, porque en el sistema privado las pacientes han seguido resolviendo prácticamente normal. No existe una lista de espera de pacientes con endometriosis en el sistema privado, así de brutal es el diagnóstico.

¿Público o privado?

-¿Por lo tanto, las únicas alternativas que tienen es ir al sistema privado, con los costos que eso significa o esperar la lenta atención en el sistema público?

-Exactamente y los costos en la cirugía de endometriosis, si no tienes Isapre, son muy altos, porque -de nuevo te repito- como la endometriosis profunda no tiene un código, los códigos que usamos para reembolsar las prestaciones asociadas a la cirugía de endometriosis están muy mal remuneradas por parte de las Isapres o el sistema público.

-¿De cuánto estamos hablando?

-Ahí hay que hacer la acotación de que Fonasa en el sistema privado no te ayuda prácticamente con nada. Por ejemplo, un día de cama que cuesta, no sé, 200 mil pesos en una clínica, Fonasa ayuda con 10 mil pesos, a ese nivel estamos hablando. Entonces una paciente para resolver una cirugía en provincia en una clínica buena donde existan expertos, tienen que contar con 5 a 6 millones de pesos, cosa que tienes que duplicar o triplicar en alguna buena clínica de Santiago.

-¿De qué depende que esto que esto se solucione?

-De la priorización de la enfermedad y de que la pandemia nos permita un poco tener de esos espacios quirúrgicos que hoy día no tenemos, porque está todo colapsado en este minuto.

-¿Ve posible que eso pueda ocurrir?

-Cada vez más se han estado priorizando, se han estado haciendo algunas cirugías en las semanas o meses que la pandemia permite hacerlo, ahora de acuerdo a lo que dice la autoridad pública, de aquí a unos tres o cuatro meses podríamos estar otra vez retomando las actividades de cirugías electivas en los hospitales.