Este martes la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputadas y Diputados despachará a la Sala el informe que recomendará aprobar o rechazar el proyecto en tercer trámite que busca limitar la reelección de autoridades públicas. En ese sentido, varios abogados invitados a la instancia manifestaron que la retroactividad iría tácitamente por la configuración del entendimiento jurídico.

Recordemos que el proyecto fue parcialmente aprobado sin retroactividad, por lo que pasó a tercer trámite, arista que se dilucidará este martes en el Congreso.

Sobre el proyecto, existen dudas entre los miembros de la instancia, luego de varias exposiciones de abogados constitucionalistas que ratificaron que la norma de retroactividad rige una vez promulgada la ley, sin la necesidad de reincorporar esta norma en una eventual Comisión Mixta. De hecho, señalaron que el Senado cometió un error de interpretación a la hora de votar la normativa.

Por lo anterior, no sería necesario forzar una Comisión Mixta para reincorporar la indicación de retroactividad, la que, recordemos, fue rechazada en el Senado por no alcanzar el quórum necesario.

De hecho, abogados constitucionalistas ratificaron lo que ya habían adelantado pocos senadores en su intervención: el proyecto que limita la reelección de autoridades rige “in actum”, lo que significa que se aplicaría una vez promulgada la ley, afectando a parlamentarios que están en el ejercicio de sus funciones y que quieran postular en los próximos comicios.

Al respecto se refirió el abogado constitucionalista Patricio Zapata, quien indicó que “aquí se produjo un error, un error de interpretación. Se pensó en el Senado que había algo de ilógico, antinatural, extraño, con darle efecto in actum a la reforma, y se habló de retroactividad. Entonces se entendió que como era algo extraño, era necesario que fuera una norma expresa el que le diera ese efecto inmediato. La verdad es que la práctica constitucional chilena apunta en la dirección exactamente contraria”.

Por su parte, el también constitucionalista, Fernando Atria, señaló que la votación fue un error del Senado. Indicó que ahora la Cámara podría aprobar el proyecto así como está y aún así seguiría rigiendo “in actum”.

“No hay en derecho público, en tanto órganos de derecho público, no hay derechos individuales fundamentales que estén comprometidos. Entonces no es una cuestión casual que las leyes de derecho público rijan in actum, no es un dato que podría ser de una manera u otra, apunta a una de las cuestiones fundamentales del derecho público”, sostuvo.

Misma postura comparte el abogado constitucionalista Jorge Correa Sutil, el que señaló que “se trata de normas de derecho público que rigen in actum, plenamente para las elecciones que están por venir. La norma no distingue entre reelecciones pasadas y futuras, por ende, para efectos de computar la prohibición deben considerarse todas las reelecciones ya acaecidas”.

En la comisión surgieron críticas al Senado. Por ejemplo, el diputado Andrés Longton (RN) que estuvo presente en la instancia, indicó que esto devela una falta de prolijidad en cuanto a lo que se estaba votando.

Puso sobre la mesa los escenarios futuros. Si bien en algún minuto se planteó aprobar la iniciativa así como viene del Senado para evitar una Comisión Mixta en la que ya no sería necesario reincorporar la retroactividad, existiría un riesgo de aplicación, considerando que la reforma no le entrega facultades al Servicio Electoral para rechazar este tipo de candidaturas.

Por otro lado, se corre el riesgo de llegar a Comisión Mixta, despachar un informe y que éste sea rechazado por el Senado con el proyecto completo, ahora que hay claridad de lo que se está votando.

“Denota una suerte de poco involucramiento respecto al sentido de las normas, cosa que debería ser parte de su trabajo. Puede ser que el Senado ahora rechace el proyecto, sabiendo que les aplica con efecto retroactivo, o por otro lado, la otra alternativa es aprobarlo como está en la Cámara de Diputados, pero el riesgo sigue latente, considerando que esto el día de mañana va a ser objeto de una disputa claramente, cuando el Servel no impugne la candidatura”, detalló Longton.

Así mismo, el diputado Leonardo Soto (PS) enfatizó en los riesgos de aprobarlo tal como viene desde el Senado. Señaló que podría nunca aplicarse.

“Esta norma viene del Senado con manifiestos errores, puntos oscuros, dudosos, vacíos, e incluso hasta incoherencia, que hacen que en definitiva, si lo aprobáramos tal como viene del Senado, puede que nunca se aplique, que sea letra muerta”, mencionó.

Asimismo, agregó que “también notamos que no existe en la reforma que viene del Senado, una norma que habilite al Servicio Electoral, que le entregue competencia, le entregue la atribución para rechazar estas candidaturas”.

En primer lugar, si la Sala de la Cámara aprueba el proyecto, habría un riesgo en su aplicación. Esto, porque la reforma modifica artículos que no tendrían correlato con la ley orgánica constitucional de elecciones populares y escrutinios, que es la ley que otorga facultades al Servel.

Sin embargo ahí están las dudas. Aprobar o seguir con la idea de forzar una Comisión Mixta. Uno de los argumentos de no aprobar el proyecto así como está, se sustenta en que la normativa no entrega garantías para que el Servel pueda rechazar candidaturas irregulares.

El presidente de la comisión, Matías Walker (DC), señaló que una de las opciones es establecer la facultad del Servel.

“Establecer expresamente la facultad al Servel de declarar la inhabilidad de las candidaturas por este propósito, para que no quede sujeto a la interpretación caso a caso”, indicó.

En caso de que se vayan a una Comisión Mixta, también existe el riesgo para quienes están a favor de que la normativa rija una vez promulgada la ley, de que el Senado simplemente rechace el informe completo, incluyendo el proyecto en general, considerando que ahora si habría consciencia de lo que se está votando.

Se espera que el proyecto en tercer trámite se vote durante este miércoles.