En la última década se había registrado una baja con respecto a los nacimientos, sin embargo, entre marzo de 2018 y marzo de 2019, según el Instituto Nacional de Estadísticas, se registraron 2.539 nacimientos más que en el mismo periodo anterior, dejando como resultado total 221.724 nacimientos para el último periodo.
La principal causa que señalan los expertos guarda relación con la inmigración en el país, pues en 2019 fueron inscritos 31.993 hijos de padres extranjeros, según señaló El Mercurio.
Pese al incremento en natalidad, los controles de embarazo disminuyeron. Según el Ministerio de Salud, la cantidad de ingresos al programa prenatal de gestantes cayó un 7% quedando en 162.542, estableciéndose como la cifra más baja de los últimos cinco años.
Según el expresidente de la Sociedad Chilena de Medicina Reproductiva, Pablo Céspedes, la baja en controles se explicaría por las barreras de la población inmigrante para acceder a salud, como también por el temor por parte de extranjeros con situación irregular de asistir a servicios.
Según el profesional, en países como Haití “no hay una cultura de control prenatal tan potente como en Chile; entonces, para las haítianas no es parte de su acervo cultural acudir a controles”, aseguró al matutino.
En esa línea, es importante señalar que solo durante 2018 fueron 5 mil las mujeres haitianas que registraron partos en Chile.
