Un palestino murió el martes en un nuevo bombardeo de la aviación israelí en la Franja de Gaza contra elementos de la Yihad islámica, indicó el ministro de Sanidad del enclave controlado por el Hamás.

Este bombardeo se produce en un contexto de crecientes tensiones con Israel tras la eliminación de un dirigente de la Yihad islámica, un grupo local que replicó con el lanzamiento de cohetes contra el Estado hebreo.

El ejército de Israel interceptó algunos de esos cohetes con su dispositivo antimisiles “Iron Dome”, pero también indicó haber atacado a dos miembros de la Yihad Islámica que se disponían a lanzar proyectiles, lo que planteaba una “inminente amenaza”.

Según el ministerio gazatí de Sanidad, el último bombardeo israelí dejó al menos un muerto –un hombre de 20 años– y un número no precisado de heridos.

El martes por la mañana, las sirenas de alarma sonaron en varias ciudades israelíes, incluida Tel Aviv, donde las escuelas y la universidad fueron cerradas debido a los disparos de cohetes.

Poco después, un portavoz militar israelí dio cuenta de “un número importante de disparos contra Israel” desde la Franja de Gaza, territorio controlado desde hace de más de diez años por el movimiento islamista Hamas y sometido al bloqueo israelí.

En Damasco (Siria), un ataque contra el domicilio de un responsable político de Yihad Islámica mató a su hijo y a otra persona, informó la agencia oficial sira SANA, que responsabilizó del ataque a Israel.