Este viernes la Corte de Apelaciones de Rancagua resolvió negar la libertad al gerente y dueño de Línea Azul, Marcelo Hernández Sandoval, quien se encuentra en prisión preventiva tras ser formalizado por distintos delitos a raíz del fatal accidente que protagonizó un bus de esa empresa el 29 de julio.

Tras el fatídico volcamiento ocurrido en la Ruta 5 Sur a la altura de San Francisco de Mostazal -que provocó la muerte de 6 personas- el jefe del taller mecánico y el dueño de la empresa fueron detenidos. Esto, porque se acreditó la adulteración de la patente del bus siniestrado, entre otras irregularidades.

En una audiencia realizada el pasado 2 de agosto, la Fiscalía decidió formalizar a Hernández Sandoval por los delitos de homicidio y lesiones de las víctimas del accidente, por ser sindicado como responsable de la circulación de la máquina en condiciones irregulares.

En esa instancia, el juez de Garantía de Graneros decidió acoger la solicitud del Ministerio Público y decretó la prisión preventiva del dueño de Línea Azul por el periodo que dure la investigación. Sin embargo, la defensa del empresario buscó revertir en la Corte de Apelaciones esa cautelar.

No obstante la intención de los abogados, la Segunda Sala del Tribunal de Alzada -integrada por los ministros Mauricio Silva Vásquez, José Marinello Federici y el abogado (i) Mario Barrientos Ossa- confirmó en fallo unánime la cautelar de prisión preventiva dictada por el Juzgado de Garantía de Graneros.

“Se previene que el Ministro Suplente Sr. Marinello, concurre a la confirmatoria teniendo especialmente presente que el dolo eventual imputado respecto de las figuras homicidas y lesivas, así como respecto de la circulación de un bus de transporte de pasajeros con una placa patente única que no le correspondía, dan cuenta de una forma de desarrollo de un modelo de negocio por parte del imputado”, reza la resolución judicial.

Producto de esa forma de operara su empresa, añade el escrito, “se genera una exposición a riesgos por parte de terceros que va mucho más allá de lo socialmente aceptable para el rubro de transporte de pasajeros de que se trata, independiente de que el resultado nefasto se produzca por una mala mantención de la máquina, por una negligente conducción o incluso, como corolario de una concausa entre ambas”.

Con todo, el dueño de la compañía deberá seguir en prisión a la espera de los resultados de la indagatoria. En paralelo, esta semana el Gobierno decidió cancelar todos los servicios -tanto los rurales como los interurbanos- de Línea Azul.