Las declaraciones del exministro de Economía, José Ramón Valente, sobre supuestas presiones para empujarlo a “ser más populista” mientras estuvo en el gabinete, generaron anticuerpos en el oficialismo. Desde la derecha tildaron sus palabras como “imprudentes y poco elegantes”.

“Si hubiera sucumbido a las presiones por ser más populista y salir a demonizar a los empresarios, quizá seguiría en el gabinete”. Esas fueron las declaraciones de Valente en entrevista con El Mercurio, luego de que el presidente Sebastián Piñera pidiera su salida y fuera reemplazado por el exministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, el pasado 13 de junio.

Las reacciones dentro del oficialismo no se hicieron esperar. El diputado de Renovación Nacional, Diego Schalper, criticó los dichos de Valente diciendo que quizás el exministro “confunde populismo con capacidad de comunicar”.

Además, hizo hincapié en el cargo de embajador de la Misión de Chile en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) que le propuso el presidente Piñera.

El senador de la Unión Demócrata Independiente, Iván Moreira, aseguró que las declaraciones de Valente son “poco elegantes” y postulan “ciertas exigencias de populismo”, por lo que lo invitó a aclarar sus dichos.

Desde el gobierno, el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, si bien aseguró no compartir los dichos, valoró la gestión de Valente mientras estuvo en la cartera económica.

El mismo exministro Valente, consultado por Radio Bío Bío sobre sus dichos, respondió a través de un mensaje de WhatsApp que “La verdad es que no tengo intención de hablar más de este tema”.