La mañana de este domingo, el obispo de la Iglesia Unida Metodista Pentecostal, Juan Ormeño, declinó referirse a las acusaciones de encubrimiento de abuso sexual que pesan en su contra.
Lo anterior, por la denuncia que realizó hace más de dos años una joven de 17 años, por los hechos ocurridos en abril de 2017, en contra del pastor Salomón Morales, de la iglesia de San Joaquín, quien fue denunciado por tocaciones, las que él mismo calificó como un impulso.
Pero el actuar de Morales al interior de la institución también ha sido cuestionado por una conducta de adulterio, lo que terminó por destapar el escándalo.
Ya que Ormeño tenía agendada para esta jornada una reunión con dos mil varones -que viajaron de todo Chile para escucharlo- en un templo de Viña del Mar, Radio Bío Bío pactó una entrevista con el religioso.
No obstante, al ver presencia de otros medios, decidió huir del templo de Gomez Carreño, sin dirigirse a los congregados que esperaban su intervención.
Desde su entorno indicaron a La Radio que debió asistir a un funeral, pese a que incluso se habilitó una sala para realizar la entrevista.
De acuerdo a fuentes cercanas a la institución, al padre de la menor afectada se le habría ofrecido el cargo de pastor a través de un allegado a Ormeño.
Sumado a lo anterior, la familia habría recibido ofertas económicas, provenientes del diezmo.
Pero la denuncia no solo quedó en la Iglesia: llegó a la justicia con una querella por abuso sexual, la que fue ingresada en 12 Juzgado de Garantía de Santiago, consignó El Mostrador.
