Como un logro para el movimiento feminista se presentó la aprobación en general y de forma unánime del Senado al proyecto que sanciona el acoso sexual en el ámbito académico.

Esto es, asegurar que los establecimientos educacionales de nivel superior constituyan espacios libres de violencia y abuso sexual.

El eje principal es la dignidad humana, la no discriminación constitucional y la prevención. Asimismo, algunos parlamentarios sostuvieron que va en la dirección correcta y a cubrir un vacío en la legislación.

El proyecto define el acoso sexual y las situaciones de agresión que pudiesen presentarse; establece como deber de las instituciones velar el buen trato, equidad de género y la erradicación del acoso sexual, ello mediante un protocolo de prevención y sanción, junto con un funcionario designado para fiscalizar estas conductas, entre otras medidas.

En el caso del modelo o protocolo de cada institución, las autoridades tendrán un plazo máximo para implementarlo de 180 días desde la publicación de la ley. Junto con ello, dicho documento será un requisito para la acreditación.

En la discusión en particular se deberá definir si se aplicará en la enseñanza media y las sanciones diferenciadas para el acoso, tanto para relaciones jerárquicas, como entre pares.

Las indicaciones de este proyecto podrán presentarse hasta el 14 de marzo. Las mociones fueron presentadas por Ximena Órdenes (IND), Isabel Allende (PS), Yasna Provoste (DC), Ena Von Baer (UDI), Carlos Montes (PS), Juan Pablo Letelier (PS), Ricardo Lagos (PPD) y Jorge Pizarro (DC).

En la sesión participó además la ministra de Educación, Marcela Cubillos.